Las razones del precio de la hoja de coca

Por Juan Giusti. Recientemente Gerardo Morales informó en el show televisivo que tiene a diario que ante el encarecimiento de la hoja de coca, iban a plantear su importación y su producción en Jujuy. Después, a coro, repitieron sus palabras los diputados.

Después se enojan conmigo cuando yo digo que son unos improvisados. Señor Gobernador y sus adláteres, los análisis económicos y políticos hay que hacerlos con seriedad.

¿Se preguntaron estas autoridades alguna vez cuál es la causa de la suba de la hoja de la coca en Argentina?

Yo acá se las explico, básicamente las causas de la suba del precio son:

1. Desabastecimiento de hojas de coca en los departamentos de Tarija y Potosí, limítrofes con nuestro país, porque Bolivia también prohibió la circulación interna, y hubo faltante de hojas en Villazón, Bermejo y Yacuiba.
2. Al ser un producto de contrabando, cuya comercialización está prohibida en este país, y siendo la hoja de coca un producto “importado”, se maneja con los tipos de cambio marginales, principalmente el llamado “dólar blue”, que está hoy a $ 138.
3. Y el factor más importante es que al estar prohibida la circulación en rutas argentinas, también se complica el contrabando del producto porque se encareció el “flete”. ¿Me explico ?.

En síntesis: poca oferta, mucha demanda y mayores costos.

Ahora bien, según estimaciones de universidades del norte del país, el comercio de hojas de coca con Bolivia, se estima en unos 24 millones de dólares anuales, los que equivalen al 0,04 % del total de importaciones de Argentina.

Otra barrabasada que dijo Morales (a quién cariñosamente lo llaman “El Emperador”) es que proponía distribuir las hojas de coca secuestradas. Realmente lo de Morales no me deja de sorprender.

El debería saber que las hojas de coca se las secuestra porque se contrabandean, ya que no se planta coca en la Argentina (voy a referirme más abajo sobre esto).

A veces estos secuestros se aplican como una infracción al Código Aduanero, otras veces como infracción a la ley de estupefacientes Nº 23.737. Esto depende básicamente depende de la cantidad de kilos secuestren las fuerzas federales, ya que la hoja de Coca es un precursor de la cocaína.

En ambos casos es un delito o infracción de naturaleza federal y tiene un solo destino: su destrucción. Y no puede ser de otra manera.

La propuesta del Emperador Morales demuestra: a) Que tiene un claro desconocimiento de cómo funciona el sistema y las leyes, en combate al narcotráfico; b) Un nivel de desesperación política, que le hace vender humo con cualquier cosa, como dije, improvisando en su show de las 21 hs de la TV local.

Pero allí no termina la cosa, la propuesta del gobernador Morales de repartir las hojas de coca secuestrada también es inviable en los hechos: ¿Quién va a envasar? ¿Quién va a repartirla y cómo va a hacerlo? ¿Quién va a garantizar la sanidad del producto?

Respecto a la última propuesta compartida con algunos diputados salteños, el plantar hojas de coca es prácticamente inviable en Argentina, ya que la coca es una planta tropical, necesita: calor, mucha agua, que no haya heladas y que las tierras donde se cultiven estén por encima de los 1000 metros sobre el nivel del mar. Son poquísimos los lugares donde se podría cultivar. La coca es una planta que es parecida al café y en Argentina, hasta Ledesma SAAI fracasó en su intento de tener cafetales.

Pero plantar hojas de coca en Argentina, supongamos que se puedan saltear los obstáculos de la naturaleza, es un camino de ida al narcotráfico, cómo lo son los proyectos de legalizar las importaciones de esa hoja.

Además, plantar o importar, que atentan contra la legalidad convencional que Argentina firmó con otros países para el combate del narcotráfico.

Insisto, aunque sea obvio, pero parece que no lo entienden: “si bien la hoja de coca no es droga, es un precursor para la cocaína”.

Si vamos por el camino propuesto por el Emperador, terminaremos teniendo las cocinas de cocaína en el país, con el problema sanitario y social que eso genera, porque no es sólo que va a aumentar la oferta de cocaína, sino de pasta base (paco). Y te aseguro que van a encontrar consumidores.

La pandemia por el coronavirus nos afectó a todos. Nos modificó estilos de vida y hábitos de consumo. Es una cuestión pasajera y hay que tolerarla. Los «coqueros» no están exentos de las consecuencias del Covid-19.

Lo que si me preocupa es que Morales, y sus diputados nacionales Osmar Monaldi, Gabriela Burgos (que es igual a su marido Diego Rotela) y Jorge Rizzotti, estén más preocupados por la hoja de coca y su precio, que por las pésimas condiciones que tienen los hospitales de Jujuy, la epidemia de dengue que sufrimos especialmente los sampedreños, o el fuerte endeudamiento de mi provincia.

Esto demuestra que están más preocupados en chiquiteces y nimiedades y no en cómo evitar el colapso de la economía de Jujuy.

Emperador deje de improvisar y de sanatear, gobierne, que Ud. no está pudiendo pagar sueldos de los empleados públicos de Jujuy por su mala administración provincial y su pasión por endeudarse; porque la crisis en la provincia venía antes del coronavirus.

Deje la «guitarra» y solucione los problemas que tenemos los Jujeños. Atentamente.

P/D: Yo sé que no es Emperador, pero también sé que tiene unas ganas de serlo…