Macri tiene un solo objetivo: asegurarse los votos que en la primera vuelta fueron para el candidato por UNA, Sergio Massa. Jujuy fue la única provincia donde ganó el 25 de octubre, superando a Daniel Scioli, del FPV, por más de 10 mil votos, dejando a Macri en el tercer lugar, con 20 mil votos menos que los que había obtenido en las PASO.
La orden de Morales era votar por el candidato del PRO y no por Massa, pero el peronismo disidente que integró la fórmula del Frente Cambia Jujuy en la persona de Carlos Haquim arrastró las preferencias de los electores hacia el candidato de UNA.
Massa, que en las PASO había obtenido 99 mil votos, el 25 de octubre subió a 154 mil.