Por el Partido Obrero
El episodio final del derrumbe macrista, desatado por su derrota en las PASO del 11 de agosto pasado, ha terminado por paralizar a su ladero local, el gobernador Morales. Mientras la devaluación y las altas tasas de interés del BCRA acarrearán una nueva escalada inflacionaria y una mayor recesión en todo el país, Morales no ha atinado más que a patear las discusiones paritarias y callarse la boca sobre el pago a los estatales jujeños de los miserables adicionales que el macrismo otorgará a nivel nacional.
La burocracia sindical peronista del Frente Gremial Amplio, se ha adaptado a la parálisis del gobierno de Morales por la misma razón que la CGT se ha bajado de cualquier exigencia obrera: apuestan al sostenimiento de un gobierno acabado a sabiendas que la continuidad de sus políticas solo traerán mayores penurias para los trabajadores y agravarán la crisis.
El enorme hartazgo de la población trabajadora contra el macrismo y sus políticas de ajuste que se manifestó en las PASO pasadas, intenta ser contenido por aquellos mismos que se dicen opositores. Le piden a Morales o a una legislatura absolutamente dominada por sus levanta-manos que den respuesta para evitar que los trabajadores tomemos la iniciativa con nuestra propia agenda y métodos.
Desde la bancada del Partido Obrero en el Frente de Izquierda, proponemos lo contrario. Impulsemos una inmediata deliberación de la clase obrera jujeña en cada uno de los lugares de trabajo y en los sindicatos, en los lugares de estudio y en nuestras barriadas. Explotemos el vacío político de un gobierno agotado para imponer nuestras reivindicaciones en las calles.
Vamos por un salario básico de $31.000, indexación de los salarios, ningún despido, reparto de las horas de trabajo y el 82% móvil de las jubilaciones. Exijamos la apertura de los libros contables del Estado y las empresas que en nombre de la crisis ajustan contra los trabajadores e impongamos el control obrero sobre las mismas. Impulsemos desde abajo y coordinando las luchas en curso la huelga general, como lo hacen los estatales de Chubut o los docentes autoconvocados de Salta.