Icono del sitio El Submarino Jujuy

Morales y Rodríguez Larreta: Distintas estrategias con un solo objetivo, 2023

Ambos tienen un objetivo, utilizan distintas estrategias de comunicación, discuten, se los vio enfrentados, pero los une un solo objetivo: regresar al poder en las próximas elecciones generales presidenciales. Juntos o irán a internas en las PASO del 2023.

Será la fórmula presidencial de la oposición y se sacarán de encima a los pesos pesados del PRO porque la UCR parece estar detrás de una sola figura.

En las últimas horas, supuestamente limaron asperezas en una charla, pero una foto lo dice todo.

El presidente de la UCR y gobernador de Jujuy, Gerardo Morales; y el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, se reunieron con el argumento de un encuentro por la Red Federal de Acción Ambiental, pero está claro qué de ese tema, hablaron apenas un poco,

El objetivo de ese encuentro, durante el lunes pasado, fue acercar posiciones en la supuesta interna feroz de Juntos por el Cambio (JxC), un sector de la oposición tremenda entre el sector que promueven el diálogo con el gobierno nacional y los que impulsan una postura de ruptura, tal vez un enfrentamiento mediático, sin concesiones.

Morales y Rodríguez Larreta, aspirantes a la candidatura presidencial de JxC en 2023, se reunieron en la Casa de Jujuy en esta ciudad con el argumento de un encuentro por la Red Federal de Acción Ambiental, pero repasaron la agenda política en común, se ocuparon de difundir profusamente una amistosa foto de la reunión y acordaron una visita del alcalde porteño a esa provincia para el mes de febrero, cuando se celebra el famoso carnaval jujeño, casi imitando cuando el expresidente Mauricio Macri se pasó carnavaleando casi dos días en la provincia, cuando ostentaba la titularidad del Poder Ejecutivo.

«Fue una muy buena reunión en la que se ratificó la necesidad de fortalecer Juntos por el Cambio», revelaron fuentes de ambos sectores que se enfrentaron para exponer sus estrategias con el sólo objetivo de llegar.

Tanto fue así, que ambos confirmaron su participación en la reunión con el ministro de Economía, Martín Guzmán, quien brindará un nuevo informe sobre las negociaciones con el FMI por la deuda externa. La misma se llevaría a cabo en el Congreso de la Nación, entre el lunes o martes próximo.

Para disimular el debate interno en la alianza opositora, para que entre en el juego del bueno y del malo, Morales defiende con intensidad el diálogo con el gobierno de Alberto Fernández y ha dicho reiteradamente que JxC tiene que reconocer su responsabilidad en la toma del préstamo del FMI por más de 40 mil millones de dólares.

En cambio, los sectores más radicalizados de la coalición, liderados por el fundador del PRO Mauricio Macri, la presidenta del partido, Patricia Bullrich, y el extitular de la UCR, Alfredo Cornejo, promueven una postura de enfrentamiento con el oficialismo, lo que profundiza las divisiones internas en la principal oposición, por lo menos para la platea que sigue la cosa política.

Incluso el propio Rodríguez Larreta -quien demandó al Gobierno nacional por los fondos destinados a la policía capitalina- postuló ese criterio de dureza y no participó ni envió delegado alguno a esa reunión con Guzmán y el presidente Alberto Fernández.

El jefe del gobierno de la ciudad de Buenos Aires dijo que «entendemos que, así como está planteada, es una reunión política más que una reunión en serio de trabajo institucional, e insistimos en que el ámbito para plantear esto es el Congreso nacional, donde se terminan aprobando las leyes». Sin embargo, luego varió su postura y se prevé que la semana entrante acuda al informe de Guzmán en el Parlamento.

Desde el otro lado de la alianza opositora, pero de ese mismo lado de la grieta la voz contraria fue de Morales, quien permanentemente instó a concurrir al encuentro con Guzmán, reivindicó el diálogo y reconoció la responsabilidad de JxC en la toma de la deuda con el FMI que ahora debe resolver el actual Gobierno.

En las últimas horas Morales reiteró lo que viene sosteniendo desde hace varios días: «Está claro que quienes gobiernan tienen la máxima responsabilidad, pero también tenemos la responsabilidad la oposición. A la deuda la tomamos nosotros (por el período 2015-2019) para pagar parte de la deuda generada en gestiones anteriores, pero también para pagar deuda que generamos nosotros para un programa de créditos que fracasó».

«Lo peor que le puede pasar al país es entrar en default», sostuvo, y admitió que «hay algunos sectores (de JxC) que piensan qué si explota todo, mejor».

«Hay un ala más radicalizada de Juntos por el Cambio que ni siquiera quiere diálogo», abundó.

En su tarea por recuperar más protagonismo para la UCR, Morales advirtió que «si pretendemos ser Gobierno en 2023 tenemos que primero poner los pies sobre la tierra y reconocer que hay cosas que hicimos mal. De hecho, la gente no nos acompañó porque defraudamos al conjunto de la sociedad».

«Terminamos perjudicando no solo a los sectores más pobres, sino a la clase media», dijo al justificar el triunfo del Frente de Todos en 2019.

Allí trazó diferencias entre el PRO y la UCR: «El PRO no tiene las concepciones del Estado que tiene el radicalismo. Nosotros creemos en el Estado presente, en la escuela pública», dijo, y advirtió que «hay concepciones diferentes también en el marco de las alianzas».

Salir de la versión móvil