Cerca de la mitad de la fuerza laboral del Ingenio Ledesma en El Talar ingresó al trabajo por medio de empresas de trabajos eventuales. El SOEAIL denunció que la empresa incumple los acuerdos firmados en 2011 y 2013 en los que acordaron un régimen de estabilización laboral para los trabajadores que se encuentran tercerizados.
“Las tercerizadas ya no tienen que existir más en el pueblo. Solamente han perjudicado a nuestras familias”, aseguró Franco López, trabajador precarizado de la empresa. Y agregó: “No sabemos de ningún otro idioma que ser trabajador de campo, plantador de caña, solamente somos eso. Lamentablemente no nos reconocen como tales. Nos despreciaron, dijeron que somos trabajadores truchos, eventuales. Somos de una familia humilde y respondemos al sudor de nuestra tarea mañana, tarde y noche. Pero hoy acá estamos tratando que se nos reconsidere como personas humanas, como padres de familia, como gente que empuja el día a día para mejorar cotidianamente. Solo pedimos que paren de denigrarnos como tercerizados, porque laburamos igual que un permanente. Somos iguales y no quieren entender que el sudor es igual, el sacrificio es igual, el horario es igual”, reclamó.
Rafael Vargas, secretario general del SOEAIL indicó: “Esto viene de la mano de la tecnología. En los años que vienen van a seguir metiendo plantadoras y lo que hoy esta pasando en El Talar va a pasar en Calilegua, en Fraile Pintado, en Libertador y todos aquellos compañeros que consideren que esta no es su lucha, yo les digo que están totalmente equivocados. Este es solo el comienzo de la lucha. Esto tiene que empezar a transformarse en algo propio porque la empresa va a seguir actuando tal cual lo hace hoy: ninguneándonos”. Y agregó: “Hemos agotado todas las vías del dialogo. A nosotros que nos quieren vender cada vez que necesitan un abrazo simbólico sensibilidad del pueblo hacia la empresa. ¿Donde está la sensibilidad de la empresa hacia su gente?”.
Por su parte, la diputada provincial por el Frente Unidos y Organizados por la Soberanía Popular, Milagro Sala, recordó que “en la década del 80 habían en El Talar 8000 habitantes y hoy hay 4000. Antes habían 3000 trabajadores, hoy solo 400. El Talar depende unicamente del municipio y de la empresa”. “Muchos de ustedes, de sus abuelos han fundado el pueblo, viven en el pueblo y no quiere emigrar. Quieren que haya más empresas, mas trabajo. Si quieren meter maquinaria que metan pero que no jodan con los trabajadores. Den por seguro que nosotros vamos a acompañar a los trabajadores las veces que sea necesario”, indicó.
En la localidad de El Talar, 180 de los 380 trabajadores que realizan tareas de plantación de caña, riego, aplicación de herbicidas y abonadas, entre otros, se encuentran tercerizados. Si bien reciben la ropa de trabajo y las órdenes de la empresa, a diferencia de los otros 200 trabajadores no cuentan con un régimen de estabilidad laboral, aunque en algunos casos, prestan servicios desde hace más de 14 años.
Por otra parte, los trabajadores reclaman que la empresa no judicialice la protesta. Ledesma inició 20 causas contra los empleados que, en su legítimo derecho, se encuentran solicitando condiciones de trabajo dignas.
Por otra parte, la CTA realizó una protesta frente a las oficinas de Buenos Aires de la Empresa Ledesma de calle Corrientes donde el Secretario del Interior de CTA Nacional, Fernando Acosta, explicó los motivos de esta protesta y expresó la solidaridad de los trabajadores de la CTA de todo el país con los 180 trabajadores despedidos por Ledesma.