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Son 24 mil las garrafas que se llevan entregadas en el mes de agosto en toda la provincia, según precisó el director de Control Comercial, Industrial y Defensa del Consumidor, Néstor Acosta, quien además aclaró que el único límite en la cantidad de garrafas está dado por el volumen de gas que llega a la provincia, que puede aumentar mes a mes.
Junto al secretario de Industria y Desarrollo Económico, Sergio Aramayo, volvió a explicar el sistema de gas envasado subsidiado implementado por el Estado nacional, rechazando las denuncias de corrupción realizadas por el radicalismo.
“Este es un programa que va creciendo, no tiene techo. A diario inscribimos a futuros beneficiarios. Del total de garrafas que distribuimos, el 65,5 por ciento de las garrafas va al interior de la provincia, y esto habla también a las claras de que es un programa abarcativo desde el punto de vista territorial”, señaló Acosta.
Consultado sobre la supuesta existencia de casos de corrupción en la distribución y venta de garrafas, indicó: “Yo estoy a cargo hace dos meses y medio y solo puedo hablar de mi gestión, no puedo dar precisiones, pero es verdad que hubo un funcionario que se desvió de su finalidad sin puntualizar cuál fue el desvío, y fue separado. Con esto no se puede hacer negocios y corromper este programa que tiene el objetivo de beneficiar al ciudadano”.
Por su parte, Aramayo relató que fueron detectados “dos casos de corrupción por parte de un arquitecto y un abogado, que fueron exonerados del ministerio”, pero que ninguno de esos dos casos tuvo que ver con la garrafa social, “sino con otros asuntos del ministerio”.
Sin límite para la demanda
Ambos funcionarios volvieron a explicar que no existen cupos para la demanda de garrafas, sino que el límite en la existencia viene dado por el volumen de gas envasado que envía la nación. “Hay un cupo de gas que llega a la provincia, que determina el estado nacional en toneladas, y llega a las tres plantas habilitadas, pero no hay cupo para la demanda. Hoy hay 24 mil, mañana puede haber 30 mil y pasado 40 mil”, dijo Aramayo.
Explicaron que la venta de las garrafas a precios mayores no es ilegal, siempre y cuando se produzca en locales comerciales y no en las plantas de distribución, donde no puede entregarse a más de 16 pesos. “El precio de 16 pesos es en planta de distribución, y lamentablemente en Jujuy hay solo tres lugares habilitados. Pero cuando esa garrafa, que en planta vale 16 pesos, sale a un comercio de Cuyaya, de Campo Verde o Alto Comedero, tiene otro precio. Lo pueden hacer, eso no está regulado”, agregó el secretario.
Acosta agregó: “Cuando hablamos de cupos nos referimos a la cantidad de garrafas de 16 pesos que nosotros estamos distribuyendo. Pero también está el gas comercial, que no ha sido eliminado. Si no, el estado podría haberse hecho cargo de la planta y ponerse a distribuir”.
