Por Aníbal Massaccesi. Hasta el 31 de marzo de este año -los Jujeños- pagábamos el gas a u$s 3,44 dólares el millón de BTU. El nuevo incremento tarifario eleva el precio a u$s 3,77 dólares el millón de BTU. Pedro Bussetti –titular de Defensa de usuarios y consumidores- afirma que el incremento elevará las tarifas de gas –en relación con los meses de invierno del año pasado- en un 407 por ciento para un usuario cuyo consumo es menor a los 100 metros cúbicos al mes. Una familia de 4 personas, en los meses fríos, con un uso mínimo del gas, está muy por encima de los 100 metros cúbicos por mes.
El ministro de energía Juan José Aranguren confesó que para octubre del 2019 el precio del gas -en boca de pozo- debe equiparase con el costo de la importación del combustible. Es decir, U$S 6,80 dólares el millón de BTU. Recordemos que en el invierno del 2015 los jujeños pagábamos U$S 1,29 dólares el millón de BTU hasta que el nuevo gobierno disminuyó los subsidios a las empresas, lo que impacto en el usuario con un incremento en las facturas de hasta un 1.500 por ciento. Un millón de BTU es una unidad de medida que corresponde con 27 metros cúbicos de gas.
El nuevo precio -que rige desde el 01 de abril de este año- solamente corresponde con el gas en boca de pozo. Lo cual también impactará en las otras dos etapas que requiere la prestación del servicio, que son el trasporte y la distribución. Así se prevé nuevos incrementos para el mes de octubre de este año y para el mes de abril del año 2018. Son muchas las empresas que utilizan el gas en su proceso productivo.
Por lo tanto, la suba también impactará en sus productos elevando los precios al consumidor. Los incrementos tarifarios son coherentes con la ideología del nuevo gobierno de Cambiemos, donde el precio de los servicios públicos se construye desde los costos y las ganancias de las empresas y sin tener en cuenta la capacidad de pago del usuario y consumidores, ni la proporcionalidad entre los ingresos de los Jujeños y los nuevos costos de los servicios públicos.
El Indec reconoció que la inflación durante el 2016 fue del 40 por ciento. El incremento del servicio del gas en el 2016 fue del 400 por ciento. El servicio de LIMSA se incrementó este año en un 39 por ciento. El precio del trasporte público urbano de pasajeros en S. S. de Jujuy se incrementó en un 45 por ciento –promedio- en el 2016. Pero los salarios de los empleados públicos este año –para tomar un parámetro- se incrementó en solo un 10 por ciento. La canasta básica total para una familia es de $13.323 –para no caer en la pobreza-.
Los servicios públicos no son un negocio sino una cuestión de derechos humanos. La falta de proporcionalidad entre los incrementos salariales y los nuevos costos de los servicios públicos transforma los tarifazos en ilegales.