Dos mujeres denunciaron a su tío por abusos sexuales cometidos contra ellas cuando eran niñas, pero la justicia desestimó el caso por considerar que los hechos prescribieron. Pero la Ley de Respeto al Tiempo de la Víctima dice que el plazo de prescripción empieza a correr cuando la persona, ya mayor de edad, formula la denuncia. Por eso decidieron hacer pública la situación y exponer al abusador.
Mariana Celeste Coelho tiene actualmente 34 años. Su prima, Milagros Mariela Ocampo, tiene 26. Hace dos días hicieron pública su situación a través de una publicación en redes sociales, donde relataron que cuando eran niñas fueron abusadas reiteradamente por su tío, el abogado Sebastián Andrés Soria, quien es actualmente funcionario de la Municipalidad de Palpalá.
«A fines de febrero hicimos una denuncia hacia nuestro tío por abuso sexual agravado por el vínculo y por la convivencia», relató Coelho en diálogo con El Submarino Radio (FM Conectar 91.5). Ante la falta de respuesta por parte de la justicia, las dos mujeres decidieron hacer pública su situación.
«Queremos ser escuchadas, por eso salimos a los medios, nos vimos obligadas a salir. Nadie quiere estar expuesta así», dijo la joven, y agregó: «Es aberrante que una persona que trabajó en la Dirección de Niñez y Adolescencia y hoy trabaja en la Municipalidad de Palpalá, esté libre como si nada».
La investigación de la denuncia presentada por Coelho y Ocampo está a cargo del fiscal Emilio Gurrieri, quien de manera personal les comunicó que no habrá imputación contra Soria porque a su entender la causa estaría prescripta.
«Mi abogado Rodrigo Cuellar no estaba recibiendo respuesta a ciertos informes que él estaba enviando, entonces yo me acerqué al fiscal Gurrieri a ver qué estaba pasando y él personalmente me dijo que la respuesta que íbamos a obtener no era la que esperábamos, que Sebastián Andrés Soria no iba a ser imputado», relató Coelho.
-¿Qué van a hacer ahora?
-Yo ya realicé la denuncia pertinente contra el fiscal Gurrieri por falta de objetividad, por algunos inconvenientes que tuvimos con él personalmente ese día. Lo que queremos ahora es que cambie el fiscal. Necesitamos, queremos y pedimos que Sebastián Andrés Soria nuestro tío materno, el cual está suelto actualmente, sea imputado para poder ir a juicio y que se escuchen nuestras voces, nuestra historia, y sea condenado. Estamos buscando todas las alternativas legales para que sea juzgado.
Años de abusos
En la denuncia que hicieron pública en las redes, las mujeres revelaron que Soria abusó de Mariana entre los 5 y los 11 años, y de Mariela entre los 4 y los 7. Soria las abordaba cuando estaban solas y las amenazaba para que no hablaran.
Mariana contó que los abusos de los que fue víctima se habían borrado de su memoria: «Nosotras recordamos esto después de mucho tiempo. Inclusive yo viví prácticamente hasta los 25 años en contacto con él, sin recordar los hechos».
Los recuerdos fueron delineándose de a poco, cuando Coelho empezó la carrera de Psicología. «Fue traumático, doloroso. Cuando recordamos, tuvimos intentos de suicidio. Y el apoyo de la familia nos motivó a denunciar y buscar justicia para proteger a otros niños, porque es un pedófilo que está en la calle y un perverso nunca deja de serlo», relató.
En redes, Coelho reveló que padeció más de 30 situaciones de abuso, que se daban a la hora de la siesta y durante la madrugada. «Me manipulaba con regalos, me decía que era un secreto y me amenazaba para que no contara nada», escribió.
Actualmente, existe una orden de restricción contra el hombre, que no puede acercarse a las dos mujeres. Tanto Mariana Coelho como Mariela Ocampo cuentan con botón antipánico. Ambas se encuentran bajo tratamiento médico, psicológico y psiquiátrico, con medicación. Y las dos atravesaron intentos de suicidio.
-¿Tienen el apoyo de su familia?
-Es complejo. Una parte de nuestra familia nos apoya y otra parte no, decidió alejarse. Porque el perfil de un perverso es muy manipulador. Cuenta con la estrategia de manipular a las personas, seducirlas con sus palabras y convencer de que él jamás haría un hecho tan aberrante como un abuso sexual a niñas de 5 años.
Otras víctimas
La mujer reveló que son tres las denuncias contra Soria, pero que «la tercera víctima decidió no avanzar porque él tiene mucho acceso a la política, al poder, tiene muchos contactos».
Coelho también contó que al hacerse pública la acusación de las dos primas, recibieron mensajes de otras supuestas víctimas de Soria, hombres y mujeres, «que no se deciden a denunciar porque se dan cuenta que nosotras no somos escuchadas y que la justicia no nos está apoyando».
«No somos solamente dos, somos muchos más -afirmó-. Nosotras estamos hablando y buscando la verdad y la justicia para muchas más niñas y niños. Espero que podamos compartir esta historia para que llegue a quien tenga que llegar y podamos tener una justicia favorable».
Qué dice la ley
Cuando se comete un delito, el Estado tiene la obligación de investigarlo y establecer una sanción. Pasado el plazo que establece la ley, ya no se puede investigar ese delito y no se puede aplicar una sanción penal. Esto es lo que se conoce como un caso que prescribe.
Con la sanción de la Ley Piazza en 2011 (Ley 26.705), se estableció que para aquellas situaciones en que la víctima de abuso sexual sea menor de edad, la prescripción comenzaba a correr recién desde la medianoche del día que cumpliera la mayoría de edad, o sea a partir de los 18 años.
En 2015 la Ley Piazza fue reemplazada por la Ley de Respeto al Tiempo de la Víctima (Ley 27.206), que estableció que el plazo de prescripción empieza a correr recién cuando la persona, ya siendo mayor de edad, se acerca a la justicia para formular la denuncia o ratificarla en aquellos casos en los que fue formulada por sus representantes legales durante su minoría de edad.
