En la capital provincial se dispuso un modesto operativo policial en torno de la Casa de Gobierno, aunque no está previsto que la movilización de ATE-CTA vaya a instalarse en la plaza Belgrano. También hay custodia en las inmediaciones de los puentes que cruzan el Xibi Xibi, para evitar la interrupción de la circulación.
«Lo primero que debemos decir es que no lo llamamos ‘protocolo antipiquetes’, sino que es una acción para garantizar las manifestaciones públicas, garantizando los derechos de quienes hagan la protesta y garantizando los derechos de quienes no están participando en la protesta», aseguró Meyer.
Para el ministro, el objetivo es que los manifestantes puedan «entregar sus petitorios y llevar adelante el reclamo de manera razonable», y al mismo tiempo garantizar la circulación del resto de la gente.
Afirmó que en esta jornada no se está aplicando el protocolo «porque no hay necesidad, ya que hasta el momento la manifestación se está llevando a cabo con absoluta normalidad».