El piquete se debe a una restricción para el paso de mercaderías desde lado argentino hacia esa ciudad boliviana. La orden fue adoptada por el Sindicato de Estibadores “Coronel Arraya”, que agrupa a cientos de familias que dependen del “paso hormiga” transportando productos.
Pablo González, delegado del sindicato, explicó que “es una medida de carácter indefinido que nos impide trabajar en el ingreso de mercadería; toda la vida fuimos atropellados en nuestro derecho de trabajar, esperamos que la población tanto de Villazón (Bolivia) como Argentina comprenda”.
Aclaró que “los motivos del corte son responsabilidad de nuestras autoridades ya que Aduana Argentina recibió instrucciones para que solo pasemos mercadería por 150 dólares. Por lo tanto cada estibador, solo puede pasar con dos bolsas de harina y cuatro cajas de aceite, lo que nos perjudica notablemente”, enfatizó.
La medida se adoptó para regular el comercio bilateral y evitar el contrabando de productos alimenticios, principalmente fruta y harina desde Argentina hacia Bolivia.