Por qué no ingresamos al Pacto Social por la Educación

Por Alejandro Vilca, diputado provincial PTS-Frente de Izquierda

Como diputados provinciales, el bloque del PTS y el Frente de Izquierda fuimos invitados a la presentación del “informe final” del Pacto Social por la Educación, encabezado por el gobernador Gerardo Morales y la ministra de Educación Isolda Calsina.

Adentro de las instalaciones del estadio de la Federación de Básquet se montó un show para la tribuna. Afuera decenas de policías, con palos, perros y escudos impedían que las y los docentes que se hicieron presentes pudieran siquiera acercarse a inmediaciones del estadio. Ahí estábamos los diputados del PTS-Frente de Izquierda. Siempre del mismo lado.

¿Es el Pacto Social por la Educación un verdadero plan para abordar los graves problemas que existen en el sistema educativo provincial? ¿Tuvieron las y los docentes un lugar para el debate, la crítica y la elaboración de propuestas? La respuesta categórica es no.

El Pacto Social por la Educación es una cortina de humo para justificar el cierre de carreras terciarias, la reducción de materias artísticas, técnicas, filosofía, la precarización laboral de docentes, el presupuesto miserable para refrigerio de estudiantes, la situación crítica de los edificios escolares y del transporte de las y los docentes. Todo bajo la cobertura de un “diálogo” que nunca existió. ¿Cómo se podría llamar “diálogo” cuando un gobierno restringe el legítimo derecho de huelga, establecido en la propia Constitución Nacional, con persecuciones y descuentos de los días de paro?

¿Es este Pacto una “originalidad” del Gobierno de Jujuy para escuchar a la comunidad educativa? Para nada. La metodología es similar a la aplicación del “Plan Nacional Decenal en Colombia 2016-2026” y al “Plan Nacional de Participación Ciudadana para la Reforma Educacional de Chile” lanzado en el 2014, entre otros países, donde las reformas en educación son fuertemente cuestionadas por su carácter pro mercado y por precarizar la situación laboral de los docentes, no docentes y de la escuela pública. ¿Cuál es esa metodología? Llenar cuestionarios preestablecidos y limitados a los temas de interés del Gobierno. A eso se reduce el “diálogo”.

Estos son algunos de los motivos por los cuáles no ingresamos al Pacto Social por la Educación ni a su show montado en la Federación. Y por eso estuvimos en la calle acompañando a las y los docentes. Esos docentes que, como salió en un estudio reciente, en la Argentina son de los peores pagos del mundo, y que en Jujuy tuvieron uno de los aumentos salariales más bajos de todo el país.

Pero hay otra salida para discutir los problemas educativos de la provincia. Convocando a un verdadero Congreso Pedagógico con toda la comunidad educativa: docentes, estudiantes, padres y madres, con carácter resolutivo. Aumentando el presupuesto para salarios y obras de infraestructura y construcción de escuelas, en primer lugar, terminando con los subsidios a las escuelas privadas, que cobran altas cuotas, así como poniendo impuestos a los grandes capitalistas, como las mineras extranjeras que se roban nuestros recursos naturales.