Este libro es el resultado de una investigación que se realizó durante varios años.
Una primera etapa estuvo dedicada a la recopilación de las historias que se contaban en Jujuy, sobre una chica que aparecía en un boliche, una chica misteriosa pero que tenía señas particulares: estaba vestida de blanco.
A las entrevistas, le siguió un estudio minucioso sobre los sentidos que esta historia presenta. Significados que se relacionan con miedos o inquietudes universales, pero también con situaciones y modos de entender la vida y la muerte que son locales y compartidas por todos nosotros.
Por eso, el libro posee dos partes: un estudio o interpretación del hecho discursivo y una compilación de los relatos, que aún hoy, sigue contando la gente.
Dice la autora en la primera parte del libro: “…el misterio no ha sido develado, […] aunque se pueden inferir algunas interpretaciones, no son definitivas…”