En medio de los incidentes, donde hubo empujones, gritos y mucha confusión, la concejal Rita Robles sufrió una crisis de nervios y terminó internada. Estaba con ella la diputada provincial Patricia Armella, entre otros militantes y dirigentes.
De las sesenta personas demoradas, 24 son mujeres. El grupo entró al edificio y fue directamente al patio principal, donde prendieron fuego a las urnas que se estaban preparando para las internas. También se quemó documentación.
El titular de la Junta Electoral, Rubén Gutiérrez, debe decidir si se sigue adelante o no con los comicios. Para ello, evalúan la cantidad de urnas y de documentación destruida, aunque adelantaron que estarían en condiciones de garantizar el normal desarrollo de las elecciones.
Estos incidentes vienen a sumarse a una serie de presentaciones judiciales, idas y venidas, denuncias de aprietes y otros bochornos que rodean al proceso interno del peronismo jujeño.
Militantes se expresaron en las últimas horas a través de las redes sociales, rechazando la convocatoria a elecciones por considerarla ilegítima, y manifestaron su voluntad no solo de no participar sino de impugnarlas. Argumentan que es inaceptable que el vicegobernador Carlos Haquim pretenda presidir el partido: “No nos representan de ninguna manera, traidores que se sientan a comer con sus enemigos,conviven con ellos y se pretenden oposición”, advirtieron.