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A pesar de la conciliación obligatoria, la Fundición El Aguilar de Palpalá continúa con el vaciamiento, y desde el lunes prohíbe el ingreso de los trabajadores diciendo que no hay trabajo para ellos. Por eso se instalaron en la puerta de la planta, mientras otro grupo se trasladó a San Salvador de Jujuy para dirigir el reclamo al gobierno provincial.
Guillermo Tito, uno de los trabajadores de la Fundición, comentó a El Submarino Diario: «Trajimos el conflicto a la capital porque la unica salida es que intervenga el gobierno, el provincial o el nacional, y le exija a la empresa mantener las fuentes de trabajo».
«Glencore van a seguir sacando el mineral, pero ellos planean trasladarlo a otra de sus plantas, en otro país, porque tienen empresas en todo el mundo», advirtió Tito, y remarcó la importancia de la planta jujeña: «Somos los únicos que producimos en el país, que podemos transformar el mineral, el plomo y la plata, para la venta».
La situación es, por tanto, preocupante. «Están saqueando los recursos naturales de la provincia sin dar fuentes de trabajo», afirmó Tito, y agregó: «No sabemos qué va a pasar con la mina y con la provincia cuando ya no haya mineral en El Aguilar. Porque a Glencore no le interesa, solo quiere llevarse el mineral».
En este contexto, el problema no es solo la pérdida de las fuentes de trabajo sino además «lo que implica el dinero para el país y sobre todo para la provincia», señaló el trabajador.
Son cerca de 120 fuentes de trabajo directas, pero se ven afectados también trabajadores tercerizados, camioneros que llevan y traen el mineral y personal de seguridad, entre otras actividades que dependen del funcionamiento de la planta.
«Es un golpe muy duro para la provincia de Jujuy, sobre todo para Palpalá, que no tiene fuentes de trabajo, que solo tiene talleres chiquitos, y tiene Zapla, que está en una situación parecida a la nuestra», indicó Tito.
