Fabián Ávila, uno de los imputados en la causa conocida como “la balacera de Azopardo”, donde también están procesados Milagro Sala y Alberto Cardozo -dos de los presos políticos de la provincia de Jujuy- dio detalles de la extorsión que sufrió por parte del juez Pablo Pullen Llermanos para denunciar a Milagro Sala a cambio de su libertad.
El abogado de Cardozo, Juan Cabezas, solicitó el apartamiento del fiscal Diego Cussel, que es quien solicitó en la causa el sobreseimiento de Jorge Rafael Páes, que estaba procesado en dos instancias, después de que éste, en el marco de una declaración indagatoria donde no tiene la obligación de decir la verdad, acusó a Milagro Sala. Después de su declaración contra la dirigente social fue primero beneficiado con la prisión domiciliaria sin cumplir ninguno de los requisitos para obtener tal beneficio y meses después fue sobreseído.
Tanto la defensa de Cardozo como la de Sala solicitaron que se declare como cosa juzgada írrita el sobreseimiento de Páes. Este recurso permite reabrir los procesos donde se llegó a una sentencia absolutoria en forma irregular, tal como quedó en evidencia durante el proceso.
Los hechos que se investigan en la causa ocurrieron el sábado 27 de octubre de 2007. Ese día Alberto Esteban Cardozo, conocido como Beto, se encontraba en el barrio San Francisco de Álava. Entre las 10.30 y las 11.30 de la mañana, cuando estaba parado en la calle un auto que iba a alta velocidad se detuvo abruptamente. Distintos testigos sostuvieron que tanto Fabián Ávila como Jorge Rafael Páes descendieron del vehículo y comenzaron a tirar contra Cardozo, que se refugió detrás de un árbol. Una de las balas impactó en el cuerpo de Soraya Pamela Belén Centella, de 11 años, que estaba dentro del negocio. La gente comenzó a gritar. Los atacantes huyeron. Según algunos testigos, Cardozo levantó a la niña, la cargó en su auto y la llevó al Hospital Pablo Soria, donde fue operada de urgencia.
En febrero de 2016, Páes fue capturado en Tartagal, después de estar dos años prófugo. Ante el juez Pablo Pullen Llermanos y el fiscal Diego Cussel cambió radicalmente la versión de los hechos que había dado años atrás. Esta vez, Páes declaró que Milagro Sala ordenó a Fabián Ávila que matara a Cardozo y que él nunca bajó del auto. En once años la dirigente social no había sido mencionada en la causa, hasta ese día. La instrucción, según Páes, Sala la dio en una reunión que mantuvieron los dos hombres en el domicilio de la dirigente el día anterior a la balacera, junto a Raúl Noro, José Choque -chofer de Sala- y otra gente que no recordaba.
Sin embargo, tanto Ávila como las otras personas mencionadas por Páes negaron la existencia de ese encuentro. Cardozo, que fue víctima del ataque, fue procesado y detenido por pedido del fiscal Diego Cussel y orden del juez Pullen Llermanos. Analía Tolaba, esposa de Cardozo denunció públicamente en 2016 y ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos en 2017 que a su marido lo torturaron y extorsionaron por orden de ese magistrado para que denunciara a la dirigente social a cambio de su libertad.
En la audiencia de este miércoles, Fabián Ávila aseguró que el juez Pullen Llermanos lo extorsionó en forma directa en dos ocasiones y brindó detalles. Relató que en una de las ocasiones, días después de haber sufrido una golpiza en la cárcel lo visitó el juez: “Me preguntó cómo estaba. Le respondí ‘acá me ves’. Yo tenía todo el ojo moretoneado. ‘Esto te pasa por no colaborar. Vos sos nadie para nosotros. Nos interesa la negra de Milagro’, me dijo Pullen».
Ávila también aseguró que la hija de Jorge Rafael Páes, Yésica, firmó un acuerdo en un estudio de abogados donde también fueron convocados su mujer, su hija y su madre. Sin embargo Ávila nunca cedió ante la extorsión. En su declaración negó que le hayan encargado matar a Cardozo, afirmó que fue Páes el que disparó en el lugar de los hechos y aseguró: “Hubo arreglos entre Páes y el juez Pullen Llermanos, por eso yo estoy aquí”.
Cuando se sentó frente al Tribunal Yesica Páes, hija de Jorge Rafael, repitió lo que dijo frente al juez Pullen Llermanos en 2016: que Milagro Sala le dio dinero para que su padre estuviera prófugo. Cuando la defensa de la dirigente social le preguntó por la reunión de la que había hablado Ávila, inmediatamente se descompuso y salió de la sala. A su regreso reconoció el encuentro, aunque negó que la hayan presionado.
El abogado de Cardozo, Juan Cabezas, pidió el apartamiento del fiscal Cussel, quien no sólo se negó a investigar los hechos denunciados por Ávila, sino que además solicitó el sobreseimiento de Páes, a pesar de toda la evidencia en su contra. Según Cabezas, “el Ministerio Público de la Acusación ocultó prueba deliberadamente. Cussel perdió objetividad y no resguardó la legalidad del proceso como lo ordena la ley”.
Milagro Sala también declaró en la audiencia de este miércoles. Negó las acusaciones en su contra. También desbarató uno de los argumentos que utilizaron para procesarla. Tanto para Cussel como para Pullen la casa que adquirió Fabian Ávila, que estaba a nombre de Milagro y del padre de sus hijos -con el que se encontraba separada desde hace varios años- es la prueba de que la dirigente social ordenó el asesinato de Cardozo. Sin embargo Ávila terminó de pagar la casa tres meses antes de que supuestamente se le hiciera el encargo. Además, nunca explicaron los motivos por los cuales el ex esposo de la dirigente se habría prestado a esa operación. En la audiencia, Sala presentó documentación con la que demostró, además, que con la venta de esa casa se compró otro inmueble para sus hijos.
La próxima semana continúan las audiencias testimoniales, el 12 de diciembre los alegatos y el 19 se conocerá la sentencia.
Persecución a los abogados
En el marco de esta causa Pullen Llermanos sancionó a los abogados defensores de Milagro Sala por haberlo recusado. Además de dar cuenta de la parcialidad del juez, los letrados presentaron un recurso en su contra por las presiones a los imputados. El juez consideró que se trataba de una presentación maliciosa y les impuso una multa de 20 mil pesos a Paula Alvarez Carreras y otra por igual monto contra Luis Paz. La semana pasada y en pleno juicio de dos causas contra la dirigente Pullen Llermanos pidió la suspensión de la matricula de los defensores hasta tanto abonaran la multa.