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Rizzotti: “Hay que trabajar con nación para que la provincia empiece a manejar recursos propios”

Jorge Rizzotti fue reelecto diputado provincial por la UCR el 25 de octubre, pero podría abandonar su banca si Gerardo Morales le propone integrar su gabinete a partir del 10 de diciembre. Así lo confirmó a El Submarino, y precisó que de sumarse al Ejecutivo provincial lo haría al frente del Ministerio de Infraestructura, que de acuerdo al proyecto ingresado en la Legislatura se unificaría con el de Vivienda. 

Asegura que la gestión de Morales buscará un vínculo distinto con la nación para dejar de “vivir de prestado”, y sintetiza: “No me mandes más pescado todos los meses, dame la caña que yo voy a pescar”.

Rizzotti no cree que el traspaso de gobierno deba generar tensiones o preocupación. “Es un periodo normal en el sistema democrático”, minimiza, aunque reconoce que es una situación singular porque “en Jujuy nunca se había dado, mucho menos en los últimos años, que aunque en el medio estuvo el gobierno de Walter Barrionuevo, siempre fue Eduardo Fellner el que condujo y decidió las designaciones”.

De todos modos, señala que “no tiene por qué ser traumático” y destaca que “lo importante es contar con información mínima sobre los compromisos inmediatos, por lo menos a los treinta días, y saber qué hay, los recursos, las obligaciones contactuales”.  

“Muchos creen que la transición consiste en que los que vienen se ponen a investigar, y no es así –aclara-. Pasó en algunos ministerios, cuando se acercaba gente nuestra a preguntar, sentían que los estaban investigando. Y también es cierto que algunos de los nuestros sentían que estaban en condiciones de investigar. Pero nada que ver. Son los organismos de control los que tendrán que evaluar el accionar de esta gestión que termina, como lo harán con la que viene”.

“Es una situación nueva, nos va servir a todos”, sintetiza, y desdramatiza la cuestión del presupuesto 2016, enviado a la Legislatura por la gestión saliente y que va a ser guía para la que empieza el 10 de diciembre. “Es así, y el Estado no se corta; no hay que hacerse ningún problema”.

En este sentido, cuenta que algunos proveedores o gente que tienen derechos frente a obligaciones del Estado les han preguntado qué van a hacer. “La respuesta es sencilla: cumpliremos con todos los compromisos, de cualquier tipo, salvo que estén fuera del marco legal”, asegura.

-¿Va a ser ministro o diputado?

-Todavía no sé. Si hay algún pedido de Gerardo para que lo acompañe en algún ministerio, ahí estaré. Yo soy soldado de la causa; donde tenga que estar, estaré. No tengo drama. Pero más allá del lugar que nos toque, se viene un período más bien largo de mucho trabajo y compromiso. Este año no va a haber descanso ni receso de fin de año. Porque además la expectativa, la esperanza y la alegría que uno ve en la gente, nos da la energía. Y si me toca en la Cámara, será en la Cámara. Hay sesiones hasta fin de año, y puede ser que haya extraordinarias en enero.

-¿Puede ser que vaya a Ministerio de Infraestructura?

-Sí, de ser ministro, sería ese. Infraestructura ahora va a estar junto a Vivienda. Lo que pasa es que en la gestión que se va, la división de los ministerios no tenía que ver con la razón de ser de las áreas sino con las relaciones humanas entre los ministros. Entonces, funcionarios que estaban peleados tenían que ir a ministerios distintos. Eso me parece que ha ocurrido con algunos casos, como por ejemplo con Infraestructura y Vivienda. Lo mismo con el ente autrárquico de las contrataciones, que tendría que estar en infraestructura porque son funciones propias de ese ministerio.

-¿Qué pasará con las obras que están en marcha? Algunas están paralizadas.

-En la mayoría de las obras que se están ejecutando con fondos de la nación hay atrasos en las certificaciones por incumplimientos, ya sea del Estado o de las empresas. Entonces habrá que ver dónde están trabadas y agilizar. Hay problemas en Los Huaicos, en Reyes, en la Quebrada, con obras importantes, como de agua o cloacas, que tienen que ver con la calidad de vida de las personas. Hay que garantizar que se terminen.

-¿Qué puede decir sobre el presupuesto para el año que viene?

-No tuve acceso a los números todavía. El monto total anda por los 24 mil millones, con 1800 millones de autorización de financiamiento. Aquí lo importante es lo que ya expresó Gerardo, que la relación entre provincia y nación tieneque ser más seria que hasta ahora, porque hemos vivido de prestado. Es indiscutible que Jujuy necesita del acompañamiento de la nación, no solo para los sueldos, que es lo inmediato, sino que necesitamos que nos garanticen los recursos de coparticipación que nos corresponden. No es ningún regalo. Lo que hay que hacer es trabajar con nación para el despegue de la provincia, para empezar a manejar recursos propios.

-¿Cómo se logra eso?

-En Jujuy hay 85 mil empleados públicos, más de 100 mil planes sociales, y 55 mil empleados privados; y cuando uno va a ver, de los 55 mil privados una gran mayoría que dependen de empresas prestadoras de servicios del Estado. Es decir que la mayoría estamos bajo el paraguas del Estado. Esto hay que cambiar y para eso hay que tener un vínculo serio con la nación. Es decir, no me mandes más pescado todos los meses, dame la caña que yo voy a pescar.

-Se conoció un fallo de la Corte que obliga a la nación a devolver fondos de la coparticipación a tres provincias. Por otro lado, salieron algunos a decir que la coparticipación debería eliminarse, y que cada provincia se arregle con sus recursos. ¿Qué análisis hace?

-Eliminar la coparticipación sería una locura. Lo que hay que hacer es acabar con la joda de la participación, que es lo que manda el fallo de la Corte, y que les den a las provincias lo que corresponde. Pero la ley de coparticipación es muy importante. Cualquier trabajador jujeño que cobra más de cierta suma, paga ganancias; todos pagamos IVA; los que tienen una casa más o menos, paga bienes personales… No se puede desconocer el aporte que hacen las provincias a la nación, y esa es guita de las provincias. Y las diferencias que se ven entre las provincias, tiene que ver con las administraciones. La prueba está en la diferencia entre Jujuy y Salta. 

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