Luego de la divulgación del rumor, negocios céntricos y de los barrios mencionados fueron cerrados, y los dueños y empleados se pusieron alertas algunos con armas, bastones, y en los comercios de deportes con palos de hockey y golf. Hasta un bate de béisbol.
Los rumores lograron el objetivo de psicopatear a todos. En la esquina de Necochea y Alvear, un grupo de empleados de una cadena provincial de supermercados, armaron una barricada de pallets, mientras en Belgrano y Necochea se organizó un vallado humano de trabajadores de comercios, armados con palos y fierros.
También le hicieron la cabeza a la Policía, que desplegó un operativo preventivo de seguridad por todos esos lugares, aunque luego rechazó la versión de robos y asaltos en masa.
Luego de más de dos horas, efectivos policiales y gendarmes lograron algo de calma, que algunos, muy pocos, abrieran sus negocios y seguir trabajando y los peatones ocasiones seguir circulando y no pararse en las esquinas mirando algo que no sucedía.