En el sector educativo, la medida de fuerza tiene la adhesión de la Asociación de Educadores Provinciales (Adep), el Sindicato de Docentes Particulares (Sadop), la Unión de Docentes Argentinos (UDA), la Asociación de Magistgerio de Escuelas Técnicas (Amet), el Centro de Enseñanza Media y Superior (Cedems) y la Asociación de Docentes e Investigadores de la Universidad Nacional de Jujuy (Adiunju). De este modo, el paro alcanza a todos los sectores y niveles.
El reclamo principal es la reapertura de paritarias, el cumplimiento de los acuerdos paritarios, ka continuidad de los programas nacionales socioeducativos, y el rechazo al Impuesto a las Ganancias y a cualquier intento de modificación de la jubilación.
Por el lado de los tres agupamientos de la administración pública -el FGE, la ITE y la Multisectorial- que en los últimos meses han decidido actuar de manera conjunta y que reúnen a más de 20 sindicatos, reclaman un porcentaje de recomposición salarial que acerque el aumento anual a la inflación, que estiman cercana al 50 por ciento. También rechazan el anuncio del gobierno en el sentido de que se descontarán los días no trabajados, como ya ocurrió con la medida anterior.