Desde este lunes, 35 árbitros y asistentes de líneas retoman on line el curso intensivo para la utilización del sistema. El árbitro asistente Diego Romero aseguró a Télam que «el VAR llega para ayudarnos y no para delatarnos».
El VAR (Video Assistant Referee) comienza a transitar hoy el tramo esencial de su conformación que desembocará, cuando retorne la actividad de la primera división del fútbol argentino, en su utilización y aplicación formal en el país.
Este sistema de respaldo a los árbitros, principales y asistentes, ya tuvo aplicación en competencias internacionales y es de utilización habitual y constante en varias ligas del mundo, algo que el presidente de la AFA, Claudio Tapia, quería adoptar en Argentina a partir de agosto, cuando se iniciará la próxima temporada de la que ya sería la ex Superliga, pero que ahora, por la pandemia de coronavirus, quedó pendiente en el tiempo.
Sin embargo, ese objetivo sigue estando en el foco de atención y la idea de aplicarlo no se detiene, por lo que desde hoy los 35 elegidos para llevarlo adelante (entre árbitros y asistentes de líneas) retoman de manera virtual el curso intensivo que venían realizando en el predio de la AFA, en Ezeiza.
Uno de esos «seleccionados» es el árbitro asistente Diego Romero, que en una entrevista con Télam explicó los pormenores de este proyecto que camina a convertirse en una muy próxima realidad.
«Estuve dirigiendo eliminatorias desde 2010, así como Copas Libertadores y Sudamericana. Ahora tengo 49 años y ya dejé de ser internacional, pero puedo decir que el VAR llega para ayudarnos y no para delatarnos. Para tener la posibilidad de acertar», remarcó Romero desde su casa en Monte Grande.
«Si yo me equivoco en mi negocio (tiene una cadena de pinturerías en sociedad con el árbitro Pablo Dóvalo) no hay problema, lo puedo arreglar, pero en el fútbol no hay remedio. Por eso en general hubo una muy buena recepción en mis colegas cuando surgió el VAR. Como es innato en el ser humano, algunos le teníamos miedo a lo nuevo. Pero ahora estamos convencidos de que esta es una nueva herramienta que nos va a sacar de todo error grosero», advirtió.
Romero entiende que será valioso «poder dirigir con el VAR en funcionamiento, para vivirlo primero dentro de la cancha y después fuera de ella, sabiendo lo que se siente en ambos lados. Porque su aplicación se realiza por cuestiones puntuales de un partido».
«La AFA está haciendo una inversión impresionante con todo el sistema implementado en Ezeiza, donde se instaló la sala de VOR (es un espacio absolutamente cerrado, donde solamente entran los árbitros del VAR). Se levantó en una cancha de sintético que está en la parte de atrás del predio», describió.
Mauro Vigliano (árbitro) y Hernán Maidana (línea) ya hicieron los cursos en FIFA y son considerados de los mejores a nivel mundial, así que son nuestros instructores. Es que el protocolo es uno y para todos. Los equipos de VAR ya se homologaron y existe una juez que es el que dirige al grupo y se lo denomina AVAR, mientras que a su primer primer asistente se lo llama AVAR 1 y al que se ocupa del afuera AVAR 2. Puede haber un cuarto como asistente de cabina», precisó.
«En nuestro país se trabajará con tres personas en el VAR, nos adelantó Federico Beligoy (secretario general de la Asociación Argentina de Árbitros), y se manejará desde el predio de Ezeiza para todos los partidos que se jueguen en estadios que tengan fibra óptica, mientras que en aquellos de primera división que no la tengan, se instalarán móviles, pero siempre fuera de los mismos», puntualizó.
«Para este curso que se está realizando fuimos elegidos 35 árbitros, entre principales y asistentes, en una proporción aproximada de 25 y 10, respectivamente, y estaba programado hacerlo de manera muy intensiva, con 12 semanas de encierro absoluto en el predio de AFA entre febrero y junio, con el objetivo de implementar el uso del VAR en agosto ya perfectamente preparados. Eso se interrumpió por la pandemia de coronavirus, pero ahora retomamos de manera virtual», verificó.
Romero contó que para el formato presencial los integrantes del curso debieron «bajar una plataforma, pero desde hoy se utilizará otra nueva, aunque con esta postergación de la competencia lógicamente la presentación del VAR también se demorará».
Claro que esto no fue lo único que dejó de hacer diariamente en Ezeiza, sino que ahora también de manera virtual a través de la aplicación Zoom, se sigue entrenando en su domicilio del sur del sudoeste del Gran Buenos Aires «con el preparador físico Víctor Polián, que es el que trabaja con os árbitros en el predio de AFA».
«En mi caso tengo espacio para moverme en mi casa, pero otros que tienen menos lugar hacen tareas focalizadas. Inclusive tenemos clases teóricas virtuales. Árbitros y lineas tenemos trabajos específicos y nosotros hacemos tareas de más explosión y velocidad porque corremos distancias cortas en media cancha y en línea recta, mientras que los jueces hacen más fondo. Pero también efectuamos ejercicios de colchoneta y fuerza», reseñó.
«Pero cuando se retome la competencia nosotros, como los futbolistas, también necesitaremos hacer una pretemporada después de una interrupción tan prolongada, nos avisó Ángel Sánchez (secretario técnico de los árbitros)», avisó Romero, que tiene como mejores recuerdos de su trayectoria «un Brasil-Perú por eliminatorias» y su debut internacional «en un Unión Española-San Pablo, de Brasil, en Chile, con Héctor Baldassi como árbitro». Su próxima «primera vez» será en el VAR.