El Tribunal Oral Federal de Jujuy citó para el próximo lunes a los integrantes del Cuerpo Médico Forense para que fundamenten porque Carlos Pedro Tadeo Blaquier, no está en condiciones de ir a sentarse en el banquillo de los acusados por la responsabilidad de la empresa Ledesma en secuestros y desapariciones ocurridos en 1976 en la zona de influencia del ingenio en Jujuy.
Dos integrantes del Cuerpo Médico Forense (CMF) de la Corte Suprema de Justicia de la Nación, durante el mes de diciembre del año pasado, señalaron que las capacidades mentales de Blaquier estaban alteradas, lo que lo volvía inhábil para estar en un juicio oral y público de lesa humanidad.
La Secretaría de Derechos Humanos (SDH) informó que sus peritos coincidían con el diagnóstico de los integrantes del Cuerpo Médico. Sin embargo, peritos del Ministerio Público y de la querella del Comité para la Defensa de la Salud, la Ética y los Derechos Humanos (Codesedh) afirmaron que Blaquier simulaba no comprender qué le preguntaban y que incluso había rechazado colaborar con el peritaje.
En esa línea, la fiscalía pidió que se realizaran nuevos estudios sobre Blaquier en una institución pública. La presidenta del tribunal, María Alejandra Cataldi, estuvo de acuerdo y así lo ordenó el 9 de febrero pasado. Sin embargo, la defensa de Blaquier –que encabeza el ex camarista Jorge Valerga Aráoz– impugnó esa resolución y logró que el tribunal le diera la razón.
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Tras ese dictamen, se decidió convocar a los dos profesionales para que expliquen sus conclusiones ante el tribunal de Jujuy. La audiencia será el primer día hábil de la semana entrante a las 9 de la mañana vía Zoom.
Fueron convocados Marcelo Rudelir, psiquiatra forense que habló del deterioro cognitivo de Blaquier, y la psicóloga Mónica Herrán, que también se expresó en la misma línea.
Uno de los miembros del Tribunal federal local, Abel Fleming consideró que está acreditado la inhabilidad de Blaquier para afrontar el proceso judicial y rechazó que se le hicieran nuevos estudios médicos diciendo que podía ser un “atentado a los derechos humanos” del imputado.
Las otras integrantes del Tribunal, Gabriela Catalano y Cataldi, coincidieron en citar a los peritos para que explicaran por qué entienden que Blaquier no puede ir a juicio.
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Cabe recordar que la Cámara Federal de Salta confirmó los procesamientos de Blaquier y su mano derecha Alberto Lemos en el 2013, dos años después, la Cámara Federal de Casación Penal, conformada por Juan Carlos Gemignani, Gustavo Hornos y Eduardo Riggi en los inicios del gobierno de Juntos X el Cambio, dictó la falta de mérito, e impidió que Blaquier y Lemos fueran a juicio de lesa humanidad y comenzó a correr el tiempo a favor de la impunidad de los procesados.
Posteriormente, los Supremos alargaron más el proceso y la causa durmió seis años. En julio del año pasado, los cortesanos Horacio Rosatti, Juan Carlos Maqueda y Elena Highton de Nolasco anularon el fallo de la Casación, a la que acusaron de haber obstaculizado indebidamente el proceso. Carlos Rosenkrantz votó en sintonía con los intereses de Blaquier y Ricardo Lorenzetti no participó de la deliberación. En total, todo el embrollo jurídico duró una década.
Tras la resolución de la Corte, el juez federal de Jujuy N°1, Esteban Hansen elevó la causa a juicio. Sin embargo, Blaquier llevó la queja a la Cámara Federal de Casación Penal. Esta semana, los casadores Mariano Borinsky y Javier Carbajo rechazaron esos planteos de Blaquier y de Alberto Lemos, el administrador general de Ledesma.
La única forma que Blaquier sea desvinculado del proceso, es por su deterioro mental y físico y eso se definirá en los próximos días o irá con Lemos y ambos tendrán un lugar en el banquillo de los acusados.
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