Muñoz fue alcanzado por la bomba en inmediaciones de la Casa de Gobierno y debió ser trasladado al Hospital San Roque, donde le hicieron las curaciones necesarias.
Expresamos nuestra preocupación por este hecho y llamamos a los responsables de estas acciones públicas a que tomen precauciones para que no se repitan estos hechos que ponen en riesgo la seguridad de los propios manifestantes, de ocasionales transeúntes y de trabajadores de prensa.
Coincidimos en el repudio a este tipo de prácticas, ya sean estas producidas por agentes de seguridad, funcionarios de gobierno, representantes sindicales o de organizaciones sociales, incluso aquellas que se generan en medio de celebraciones tradicionales como el carnaval, entre otras.
Reinvindicamos así la labor de los trabajadores de prensa, fundamental para garantizar no sólo la libertad de expresión sino también -y sobre todo- el derecho a la información del que debe gozar toda la ciudadanía.