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Terremoto en Perú de 6,8 grados deja al menos un muerto y 45 heridos

Un muerto, 45 heridos de consideración y 20 leves y centenares de casas afectadas es el resultado del terremoto de magnitud 6,8 que sacudió en la madrugada de hoy al suroeste del Perú, informó la jefa del gabinete ministerial, Mercedes Aráoz, tras recibir los respectivos informes.

El único muerto confirmado es un hombre de 55 años cuya precaria casa fue aplastada por una piedra en el distrito Yauca, departamento de Arequipa, indicó Aráoz, quien descartó versiones periodísticas que hablaban de un segundo fallecido en el distrito Bella Unión.

La ministra ratificó además que son falsas las versiones de prensa que señalaban que había 17 personas atrapadas en una mina o que numerosos campesinos estarían sin ser ubicados a lo largo de Arequipa, uno de los departamentos más poblados del país.

El Instituto Geofísico del Perú (IGP) estableció la magnitud del sismo, que se sintió a las 4:18 horas locales (9:18 GMT), en 6,8 en la escala de Richter, con lo que corrigió datos previos de otras entidades extranjeras, como el Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS), que habló de 7,1.

Según el IGP, el epicentro se situó en el mar, a 48 kilómetros de profundidad y a unos 56 kilómetros de la localidad de Lomas, en la provincia arequipeña de Acarí, donde la intensidad llegó a VI en la escala de Mercalli.

El sismo se sintió además en otras partes del Perú y el norte de Chile, pero con especial notoriedad en los departamentos de Ica y Ayacucho, donde hubo intensidades de hasta entre III y IV.

El presidente del Perú, Pedro Pablo Kuczynski, viajó a la zona para supervisar los trabajos de socorro, al igual que el ministro de Salud, Abel Salinas; la gobernadora de Arequipa, Yamila Osorio, y varias otras autoridades.

«Lo importante es que el Gobierno está alerta. Estamos trabajando al pie del cañón», afirmó Kuczynski, quien tras recorrer el distrito Chara dijo que en solo esa jurisdicción hay unas 100 casas dañadas.

Defensa Civil trabaja ahora en el censo de los daños materiales. Las casas que cayeron total o parcialmente estaban construidas con adobe, material precario derivado del barro que es usado por las clases populares para levantar sus viviendas.

La posibilidad de un tsunami fue descartada desde temprano por los expertos, mientras en la región se sentían répicas con magnitudes de menos de 4,0.

El Perú es un país de alto riesgo sísmico por la presencia de fallas geológicas en sus alrededores.

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