Arnaldo Nieva, delegado de ATE, explicó que ya mantuvieron una reunión con Cristian González, el interlocutor de la ministra de Educación, Florencia Gelmetti, en la que se comprometieron a que toda la gente que sea trasladada va a tener las mismas condiciones de salubridad e infraestructura que en el centro. “Pero esto no fue así”, aseguró, y dio un ejemplo: “Se comprometieron a traer gas, y trajeron dos garrafas vacías”.
“Por eso la asamblea permanente determinó pedirle a la ministra que se acerque a conversar con el personal, que en gran parte es no docente, y se siente manoseado”, indicó, y agregó: “Si la ministra tiene la predisposición, se puede levantar la medida”.
Los trabajadores aseguran que en el edificio del Barrio Santa Rosa no están dadas las condiciones óptimas, ni para la atención al público ni para los propios empleados. De hecho, el traslado de la EET N° 2 se decidió precisamente por problemas edilicios.
El sindicalista aseguró que “si bien hay una ley que dice que todas las oficinas públicas que están en el casco céntrico deben trasladarse, algunas dependencias se llevaron a lugares que no tienen las condiciones mínimas, no tienen la infraestructura ni la debida seguridad laboral para los compañeros”.
Recordó que este reclamo viene a sumarse a otro anterior, el de insumos y equipamiento necesarios para que los trabajadores cumplan con sus funciones: “Esto ya viene de larga data y llegamos a concluir que la ministra de Educación hace oídos sordos a los pedidos de los trabajadores del ministerio del cual ella está a cargo”.