Los tres policías están procesados por los delitos de “extorsión e instigación a la violación de los deberes de funcionario público en Concurso Real”. Son los comisarios Noemí del Valle Aybar y Carlos Esteban Rivera, y el oficial Guillermo Andrés Rosso.
Por aquellos días, la policía local sublevada dejó indefensa a la población jujeña de la capital y el interior, sin seguridad, y muchos efectivos instigaron los robos y saqueos que cometieron grupos de personas contra supermercados y comercios de electrodomésticos.
El paro de los efectivos policiales fue en reclamos de un básico de 8.500 pesos y otras mejoras en las condiciones laborales. Tomaron la sede central de la Policía y Casa de Gobierno, donde produjeron destrozos, golpearon a empleados y atacaron a gendarmes que brindaban seguridad.
Los hechos de fines de 2013 se cobraron, además, la vida de un joven de Perico.