El Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH) condenó ayer a Grecia a pagar 87.000 dólares a los familiares de un migrante sirio que fue herido por un disparo de los guardacostas griegos en 2014 y que falleció un año después.
La corte europea estimó que Atenas no demostró que «el uso de la fuerza era absolutamente necesario» para detener una lancha con migrantes el 22 de septiembre de 2014 en la zona de Pserimos, frente a Turquía.
La lancha, conducida por dos traficantes turcos, chocó en varias ocasiones contra la embarcación de los guardacostas griegos e hirió a uno. Estos dispararon 13 balas hacia el motor de la lancha para detenerla.
Dos de los 12 migrantes que se encontraban a bordo, ambos sirios, resultaron heridos. Uno, Belal Tello, fue alcanzado en la cabeza y falleció a finales de 2015 en Suecia, reseñó la agencia AFP.
La operación «no se llevó a cabo de manera a minimizar el uso de la fuerza letal y los posibles riesgos para la vida», según la decisión del TEDH, que consideró que los guardacostas podían suponer que había migrantes a bordo. Grecia ya fue condenada por incidentes que implicaban a migrantes.
En julio de 2022, el tribunal con sede en la francesa Estrasburgo dispuso el pago de 360.000 dólares a 16 demandantes cuya embarcación naufragó en el mar Egeo en enero de 2014.
Once personas, entre ellas ocho niños, murieron en este naufragio provocado por un buque de los guardacostas griegos que navegó a gran velocidad cerca de su embarcación.