La Justicia penal condenó a la pena de 10 años de prisión a un hombre que confesó haber abusado de su hijastra. Además deberá pagar una suma de dinero que ha sido estipulada entre las partes.
La semana pasada un hombre de 40 años admitió durante un juicio abreviado los ataques sexuales que cometió contra una niña de 12 años, aprovechando la ausencia de la madre, que era su pareja.
En el fallo quedó sentado un precedente judicial en la provincia: el hombre debe pagar a la madre de la niña una suma de dinero que acordaron entre las partes, como resarcimiento por los daños físicos y emocionales que provocó.
El magistrado que presidió el juicio fue Cristian Leonardo Molina, juez de Control y habilitado en Violencia de Género, mientras que el fiscal fue Aldo Lozano, quien en la apertura de su alegato puso en conocimiento los hechos por los que se juzgó al acusado.
En la única audiencia, celebrada días atrás, el hombre de 40 años asumió su culpabilidad, manifestó estar arrepentido del daño que causó a la víctima y a sus familiares y fue inmediatamente trasladado a la Unidad Penitenciaria especializada a los delitos sexuales Nº 7 del barrio Alto Comedero.
El sujeto fue condenado por los delitos de «abuso sexual con acceso carnal agravado por la convivencia, abuso sexual con acceso carnal agravado por la convivencia y guarda, abuso sexual simple agravado por la convivencia», previstos y penados en Código Penal de la Nación, y acordó pagar a la madre de la niña una suma de dinero en dos tramos.