«Estos son los 13 represores que negocian su impunidad con un sector del gobierno», anuncia el Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS) en un hilo de X donde detalla quiénes son los genocidas que recibieron la visita de seis diputados y diputadas de La Libertad Avanza (LLA) el 11 de julio pasado.
«Hace casi 50 años que estas personas le mienten a la sociedad y no dicen lo que saben: ¿dónde están las y los desaparecidos? ¿Y los niños y niñas, ahora adultos, a quienes les robaron su identidad?», plantea el CELS en un posteo acompañado por la foto general para la que posaron los represores y sus visitantes.
Luego detalla quiénes son esos genocidas, qué condenas recibieron y por qué delitos, cerrando el foco en sus rostros.
Se trata de exmiembros de fuerzas armadas y de seguridad, y agentes de inteligencia, sobre los que pesan condenas por secuestros, torturas, asesinatos, violaciones, apropiaciones de bebés y otros delitos. Algunos de ellos fueron juzgados luego de haber estado prófugos durante décadas.
Alfredo Astiz
«El ángel rubio» es uno de los máximos exponentes de la represión ilegal. Parte del grupo de tareas de la ESMA, se infiltró entre las Madres de Plaza de Mayo. Condenado a perpetua por secuestros, torturas y asesinatos, entre ellos el de las monjas francesas.
Raúl Guglielminetti
Exagente de inteligencia del Ejército. Actuó en Automotores Orletti, donde asesinaron a militantes de la región como parte del Plan Cóndor. Fue identificado en otros centros clandestinos como Escuelita de Neuquén y circuito ABO. Fue condenado a perpetua.
Antonio Pernías, alias Trueno o Rata
Teniente de navío, miembro del grupo de tareas de la ESMA. Fue parte del operativo que secuestró al grupo de la Iglesia Santa Cruz y del que asesinó a curas palotinos en San Patricio. Fue condenado a perpetua.
Adolfo Donda Tigel
Fue jefe de operaciones del grupo de tareas de la ESMA. Lo condenaron por secuestros y asesinatos, entre ellos el de la diplomática Elena Holmberg. Fue condenado también por la apropiación y el robo de la identidad de su sobrina Victoria Donda.
Carlos Suárez Mason (h)
Excapitán de navío, hijo de uno de los hombres más despiadados de la dictadura y responsable de más de 60 centros clandestinos. Apodado “El hijo de Sam”, fue condenado a perpetua por su actuación en la ESMA.
Mario Alfredo Marcote
Miembro del Servicio de Informaciones de la Policía de Santa Fe, donde se reunía y clasificaba información de inteligencia. Además de ser responsable de secuestros y torturas, fue condenado por violación de detenidas.
Miguel Ángel Britos
Fue agente de policía en la Superintendencia de Seguridad Federal. Participó del operativo en el que asesinaron a Eduardo Ruival y secuestraron a Claudia Marandet. Fue condenado en el juicio por el circuito represivo ABO (Atlético-Banco-Olimpo).
Juan Carlos Vázquez Sarmiento, alias el Colo
Fue suboficial de la Fuerza Aérea en la Regional de Inteligencia Buenos Aires (RIBA). Estuvo prófugo 20 años, fue detenido en 2021 y condenado por la apropiación del nieto 102, Ezequiel Rochestein Tauro, quien nació en la ESMA.
Honorio Martínez Ruiz, alias Pajarovich
Fue agente de la SIDE. Fue condenado a perpetua por crímenes en Automotores Orletti, centro clandestino base del Plan Cóndor en Argentina.
Marcelo Cinto Courtaux
Fue jefe del Destacamento 201 de Inteligencia en Campo de Mayo. Estuvo prófugo hasta 2017. Fue condenado a perpetua por los crímenes contra militantes montoneros que participaron de la Contraofensiva.
Julio César Argüello
Excabo de la Brigada de Investigaciones de la Policía Bonaerense de La Plata. Fue condenado por secuestros y torturas en el juicio por los crímenes de lesa humanidad en el denominado «Circuito Camps».
Manuel Cordero Piacentini
Exmilitar uruguayo, se desempeñó en el Servicio de Información de Defensa y en el Organismo Coordinador de Operaciones Antisubversivas (OCOA) de su país. Tenía como misión perseguir exiliados políticos en Buenos Aires como parte del Plan Cóndor.
Gerardo Arráez, alias Nito
Expolicía. Integró el circuito represivo de Atlético, Banco y Olimpo. Les tomaba fotos a las víctimas de sus torturas. Luego de estar prófugo, fue condenado por los secuestros y torturas de 285 personas.
Hace casi 50 años que estas personas le mienten a la sociedad y no dicen lo que saben: ¿dónde están las y los desaparecidos? ¿Y los niños y niñas, ahora adultos, a quienes les robaron su identidad?
Estos son los 13 represores que negocian su impunidad con un sector del gobierno. pic.twitter.com/xrIo3IISeu— CELS (@CELS_Argentina) August 7, 2024