7 de cada 10 trabajadores a nivel global aseguraron que delegarían la mayor cantidad de tareas posible a la inteligencia artificial para disminuir su carga de trabajo, en un relevamiento que difundió hoy la empresa de tecnología Microsoft.
En la región, el porcentaje baja a 67% y en la Argentina, dónde mil personas respondieron a la encuesta, baja a 63%, dice el informe que reunió la opinión de 31.000 trabajadores de 31 países.
En la Argentina, precisó el relevamiento, el 77% consideró que usaría la inteligencia artificial para algo más que las tareas administrativas, el 82% delegaría trabajos analíticos y un 74% también la utilizaría para aspectos creativos de su rol.
El informe sostuvo además que, a nivel global, los empresarios consultados están 1,9 veces propensos «a considerar que la inteligencia artificial aporta valor agregado al aumento de trabajo al impulsar la productividad», en tanto que en la Argentina esa disposición sube a 2,5 veces.
Sin embargo, el 60% de quienes fueron encuestados en la Argentina marcaron que «luchan por tener suficiente tiempo y energía para terminar su trabajo», afectado por la «deuda digital» que se genera por la «dificultad de gestionar y procesar correctamente el creciente volumen de chats, correos electrónicos y datos que reciben a diario», en tanto que a nivel global el 64% de los trabajadores encuestados dice estar en esa misma situación.
«Del mismo modo, casi 3 de cada 4 líderes argentinos (71%) manifestaron estar preocupados por la falta de innovación (frente al 60% a nivel global)», agregó el informe.
Señaló que «sólo el 39% de los trabajadores argentinos consideró que sus colegas los extrañarían si no se unieran a la mayoría de las reuniones (frente a un 35% global) y un 66% aseguró no tener suficiente tiempo de concentración ininterrumpida durante su jornada laboral (frente al 68% de los trabajadores globales)», precisó la encuesta.
Finalmente, para el 82% de los empresarios argentinos encuestados «dentro de poco cada empleado necesitará nuevas habilidades básicas como el uso de herramientas impulsadas por la inteligencia artificial».
Mientras que el «54% de los trabajadores argentinos» manifestó «carecer en la actualidad de las capacidades adecuadas para realizar su trabajo (frente al 60% de los trabajadores globales)».