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En diálogo con El Submarino, el dirigente de la Organización Barrial Tupac Amaru Raúl Noro salió a desmentir la solicitada publicada en los diarios impresos de Jujuy por el senador Gerardo Morales, enemigo acérrimo de la conductora del sector, Milagro Sala y de la gente que trabaja y milita en la agrupación mencionada. Con ironía, dijo que Morales tiene «atributos paranormales» por afirmar que conoce el contenido de las conversaciones ajenas.
“Hay que tener cuidado, si alguien dice que es mi amigo puede que Gerardo Morales le prohíba tomar café conmigo. Lo curioso es que la foto fue tomada subrepticiamente, como se hacía en la dictadura. Parece que había gente de los servicios de información de Morales agazapada”, señaló Noro.
Afirmó: “Yo estoy preocupado. Obama espía a Dilma en Brasil, a Merkel en Alemania, y acá Gerardo tiene un servicio de informaciones que espía nuestros movimientos. De modo que les pido a los jujeños que se cuiden, no vaya a ser que tengan un desencuentro provisorio con Gerardo Morales, o una disputa, un intercambio de palabras, y les ponga sus servicios de inteligencia a perseguirlos y publique en los diarios todo lo que hacen”.
-¿De cuándo es la foto de Morales y Milagro Sala que acompaña su solicitada?
-Es de 2009, creo. Él andaba buscando votos en esa época, y la abrazó a Milagro. Vino al festival por el Día del Niño, en 19 de Abril y Gorriti. Ahí se ve la cara de felicidad de Milagro por las copas de leche, por la fiesta. A mí me llama la atención. Parece que es un chico bipolar. Porque así es la bipolaridad: en un momento, sos de una manera y en otro de otra. Es todo muy extraño. Yo estoy con cierto cuidado, no sé cómo moverme, con quién tomar café o encontrarme.
-¿Ese encuentro con el juez Aróstegui ocurrió en un lugar público?
-Obvio. Yo no soy amigo de Aróstegui. Lo conozco porque él era uno de los primeros candidatos de Annuar Jorge, y como tal yo le hice varias entrevistas. Además era abogado de la Legislatura en la época en que yo trabajaba allí, en el área de prensa. Cómo no lo voy a conocer. Y si vamos más atrás, en la adolescencia, él era más chico que yo, pero yo conocía a sus hermanas, fui a varias fiestas con ellas. Es que en Jujuy todo el mundo se conoce. Además pareciera que Gerardo Morales tiene atributos paranormales.
-¿Cómo es eso?
-Si él sabe lo que estamos conversando, será que puede leer el pensamiento a través del espacio y darse cuenta de lo que estábamos haciendo. Porque de otro modo, cómo va a tener tanta precisión. Y hay otro indicio. Cuando fue el atentado a Milagro en el barrio Mariano Moreno, al otro día, a primera hora, Gerardo Morales dio una conferencia de prensa diciendo quiénes habían sido los atacantes. Y eso no lo sabía ni el fiscal, ni yo ni la Tupac. Solo después, a partir del video y de las investigaciones, se pudo dilucidar la identidad de los presuntos autores. Pero él, mucho antes, sabía el nombre y apellido. Entonces hay dos posibilidades: o es vidente o está detrás de lo que pasó. Es lógica pura.
-¿Por qué la Tupac marchó al juzgado que investiga el atentado?
La idea es defender la justicia como corresponde, porque es necesario reforzar el cuidado y la atención a los mecanismos judiciales, para que sean absolutamente independientes y equitativos. Nosotros confiamos en la justicia, pero nos preocupa que cierto sector, encabezado por Gerardo Morales, pretende desjerarquizar la investigación de la fiscal. Será porque a él no le conviene. Pero lo importante es que la justicia sea activa, en aquello de dar a cada uno lo suyo, resolver adecuadamente. Vamos a interiorizarnos de la causa y defender las instituciones.
