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Cerca de 10 mil niños y niñas de toda la provincia participaron de la 14 edición del Encuentro Provincial de Pesebres que se llevó a cabo este domingo, que finalizó en horas de la noche, en el atrio de la iglesia Catedral de la ciudad capital.
La jornada se extendió por varias horas, debido a la gran cantidad de grupos de pesebres que se inscribieron. Se estima que participaron más de cien grupos de adoradores.
La marcha de los adoradores de pesebre se inició frente a la Legislatura, por Canónigo Gorriti hasta calle Belgrano, para llegar luego a la Catedral. Allí, en el atrio del templo, cada grupo de chicos y chicas realizó una adoración frente al pesebre y mostraron sus coreografías y cantos. Y aquellos que llevaron el palo de trenzar, se lucieron también con sus figuras. Luego tomaron la merienda y se llevaron sorpresas que donaron los vecinos.
Participaron grupos de adoradores de las localidades de La Quiaca, Humahuaca, Tilcara, San Pedro, Libertador, Yuto, Santa Clara, Perico, Palpalá, Monterrico, El Carmen, entre otros puntos de la provincia.
En el marco litúrgico que significa la Navidad que finaliza el próximo domingo, con el bautismo de Jesús, el párroco de la Catedral, y organizador del encuentro, Manuel Alfaro, dijo que «se hacen estas adoraciones en la provincia conservando las tradiciones».
Con el ritmo de villancicos y bajo un sol radiante los grupos de niños, vestidos con uniformes distintivos y emulando a los personajes del pesebre, brindaban un espectáculo con las diferentes formas de adorar a Jesús, como el «baile de la cinta», en el que trenzan y destrenzan figuras multicolores; la danza del «Wachi torito» y canciones como «Burrito sabanero y «Vamos pastorcillos», entre otras.
Esta fiesta religiosa es una de las más tradicionales de la provincia y atrae a gran cantidad de turistas que llegan a tomar imágenes de los bailarines y del pesebre de tamaño real, creado por el reconocido escultor Fernando Pugliese.
El pesebre de tamaño natural tiene las imágenes de la Virgen María, José y el niño Jesús acompañadas por las de una llama, una vaca y un burro. También están los Reyes Magos de fisionomía andina, con vestimentas y elementos típicos de la región.
Las piezas que componen el particular pesebre de tamaño real, están construidas con resina y ceba de vidrio.
