El ministro de Cultura de la Nación, Tristan Bauer anunció que habrá cambios en el Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales (Incaa), luego de la represión que ejecutó la policía de la ciudad de Buenos Aires, frente a la sede del organismo, que exigía la renuncia de su titular, Luis Puenzo. Hubo detenidos.
“Con respecto a Puenzo, me voy a reunir con él, pero va a haber cambios en el Incaa porque la intención es darle solución a una situación tensa”, expresó Bauer en una breve e improvisada conferencia de prensa y mientras manifestantes que permanecían en el lugar gritaban “¡Fuera Puenzo!”.
El funcionario subrayó que “para este gobierno la producción de contenidos nacionales es fundamental”, pero aclaró que las leyes de fomento tendientes a favorecer esa política “dependen del ámbito legislativo”.
Dando muestras de conocer la delicada situación del Incaa, Bauer reconoció que “también hay una situación conflictiva en la Enerc (Escuela Nacional de Experimentación y Realización Cinematográfica que depende de la entidad) y se va a llamar a concurso para el cargo de rector”.
La presencia de Bauer fue decidida para atender el contexto del enfrentamiento entre manifestantes y la Policía de la Ciudad de Buenos Aires debido al corte total de la calle Lima, que bordea la Nueve de Julio.
Más tarde, desde la cartera a su cargo, se emitió un comunicado donde se expresó “el más enérgico repudio ante el accionar de la Policía de la Ciudad, que generó los incidentes y la detención de tres trabajadores y estudiantes, que estaban manifestándose pacíficamente en las puertas del Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales (Incaa)”.
Entre los detenidos durante la movilización y debido al alegado propósito policial de liberar un carril de la calle en la que funciona el Incaa, la Asociación Trabajadores del Estado citó a Agustín Ríos, Manuel Alam y Andrés Martiervich, los tres estudiantes de la Enerc, mientras que desde Documentalistas Argentinos (DOCA) añadieron al cineasta Juan Mascaró, quien preside esa organización.
El cineasta Alejandro Rath, presente en el reclamo, dijo a Télam que «hubo un operativo policial desmesurado» para una manifestación pacífica y que el corte de calles sucedió porque la cantidad de gente presente superaba al espacio de la vereda y los dos carriles de Lima.
Diferentes actores del sector audiovisual convocaron a una concentración que se desarrolló desde las 15 para exigir la renuncia de Puenzo.
El principal descontento con la gestión del cineasta es con la no modificación del Plan de Fomento, «impuesto en el gobierno de (Mauricio) Macri que concentra la producción cinematográfica en las productoras más grandes radicadas en AMBA».