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Para las seis de la tarde de este viernes está prevista la asamblea de trabajadores del Ingenio Ledesma, en la sede del sindicato. Allí, la dirigencia informará sobre la reunión que mantuvo ayer con la empresa, que no mejoró la oferta salarial sino que, según describen, solo «movió plata de un lado a otro». La intención de la empresa es la de equiparar los sueldos jujeños a los de Tucumán.
«Levantamos el paro el martes y negociamos recién el jueves. Ahí perdimos 24 horas. Podríamos seguir negociando hoy, pero nos dicen que recién el lunes, así perdemos más tiempo. Y no sé cómo llegaremos al lunes, porque hoy hay asamblea», describió a El Submarino Radio (91,5) Rafael Vargas, secretario general del Sindicato de Obreros y Empleados Azucareros del Ingenio Ledesma (Soeail).
Tal como lo impuso la empresa, la reunión se hizo con la presencia de representantes de los ingenios Tabacal y San Isidro en el marco de la Cámara Azucarera de la Región Norte Argentino (Carna). «Nosotros intentamos tener un mano a mano, pero la empresa respondió que no, que su postura era seguir en el Carna», repasó Vargas.
En la reunión de ayer la empresa modificó su oferta, lo que no implica que la haya mejorado. Hablando en números: tanto Ledesma como Tabacal ofrecen 20 mil pesos, pero Ledesma ofrece 2500 anuales más, no remunerativos, en negro, divididos en doce meses, con lo que pasa de 20 mil a 20.280.
«El premio siempre existió, desde la primera oferta. Antes de la medida de fuerza los trabajadores ya lo conocían. Acá lo que hace la empresa es mover la plata de un lugar a otro», analizó el sindicalista.
Vargas destacó además que, de acuerdo a lo que ofrece la empresa, la tira final queda por debajo del acordado en San Isidro, que es de 21.900 pesos. Y detalló: «Tucumán acordó un básico de 15.100 pesos, y a nosotros nos ofrecen 14.000; ya empezamos mal. Además, ellos en abril arrancan con 17.700, y Ledesma nos propone arrancar en abril con 15.100 pesos».
El sindicato, en tanto, viene pidiendo 21.900 pesos de tira final, que en el curso de las negociaciones bajó a 21.750. «Nosotros fuimos mostrado gestos», remarcó Vargas.
«Venimos de capricho en capricho; que hoy sí, que mañana no, mientras que de parte de los trabajadores hubo buena voluntad, hubo un impase de la medida de fuerza, sobre todo por los días de lucha que hemos tenido, y la intención fue poder seguir haciendo fuerza entrando a trabajar, oxigenando. Se hizo el mantenimiento de los trapiches y se puso todo en funcionamiento normal», comentó.
Vargas llama la atención sobre una contradicción: por un lado, la empresa se ocupó de informar que la medida de fuerza tenía un bajo acatamiento, pero en la reunión, al tratar la cuestión de la producción, «ellos dijeron que ya no se podía hablar como veníamos, porque ya no se iban a alcanzar las toneladas previstas».
«Habían dicho que se estaba trabajando normalmente, y ahora resulta que no les dan las toneladas de molienda. Eso muestra el alto acatamiento que hubo en fábrica, con sectores que han quedado comprometidos en un cien por ciento», agregó.
-¿Cuándo vuelven a reunirse con la empresa?
-El lunes.
-¿Qué cree que va a pasar en la asamblea?
-La gente no viene muy contenta con lo que está pasando. Ledesma es el ingenio más grande del país, y no puede tener uno de los salarios más bajos de la actividad. Además nos hicieron perder el tiempo. Es una truchada lo que hicieron. Ahora van a tener que asumir la calentura de la gente, porque además el precio del azúcar se duplicó del año pasado a acá, y el salario de los trabajadores no se duplicó.
-¿Puede ser que vuelvan al paro?
-Están todas las posibilidades. Pero lo decidirá la asamblea. En la asamblea anterior se vieron los estados de ánimo de los compañeros, que estaban en la disyuntiva de seguir con la medida de fuerza o dar la oportunidad para negociar. Pero ante esta tomadura de pelo, esta pérdida de tiempo, de tomar el mismo dinero y dividirlo en doce meses, no sé qué va a pasar.
