El Submarino Jujuy Noticias de Jujuy, Argentina y el mundo
La Mesa de Trabajo de ONG de la provincia que trabajan con la problemática de la discapacidad convoca con urgencia a las asociaciones, fundaciones, ONG y organizaciones de la sociedad civil, familiares y personas en general que estén vinculadas con la temática de la discapacidad, a dirigirse a la Federación de Entidades para Personas Discapacitadas de Jujuy (Fendij) para recibir apoyo sobre la regularización de su situación respecto de las pensiones y para ser asesoradas sobre la documentación que tienen que presentar para no perder el beneficio.
La Fendij adelantó que las personas interesadas pueden dirigirse a su sede de calle Lavalle 10, en el monoblock H, de 9 a 12 horas. El trámite en la Anses debe cumplirse antes del 19 de octubre, por lo que recomiendan acercarse lo antes posible, pues los requisitos son complicados y llevan tiempo. También pueden contactarse por teléfono, al (0388) 15 500 2550 o (0388) 15 500 5764, o al correo electrónico inclusiondiscapacidadjujuy@gmail.com.
Ana Ascárate, representante de las ONG que integran en la Mesa del Consejo Provincial para Integración de las Personas con Discapacidad y la Mesa de la Secretaría de Desarrollo Humano del área Accesibilidad, dio detalles de la situación en diálogo con El Submarino Radio (91.5).
Las pensiones por discapacidad se crearon en la década de 1990 para los trabajadores que veían limitada su posibilidad de tener un empleo. Más tarde se sumó a los niños discapacitados y creció como una ayuda para todas las personas con discapacidad que no tenían una asistencia adecuada. Actualmente, esa pensión puede llegar a un máximo de 6 mil pesos, muy por debajo del costo de la canasta básica.
Ahora el gobierno quiere hacer un control para ver si hay incompatibilidades. Por ejemplo, si una persona con un hijo con discapacidad cobra la pensión pero al mismo tiempo trabaja o tiene un auto, le quita el beneficio. Con esta explicación, desde sectores oficiales se desmintió la denuncia de que la intención era eliminar estas pensiones. Sin embargo, las organizaciones vinculadas con el tema advierten que el objetivo final es reducir al máximo la cantidad de beneficiarios.
«Lo que están planteando es incoherente con la realidad que vivimos, porque un padre que tiene un hijo con discapacidad motora necesita la pensión para pagar la nafta, los insumos, los remedios. Lo mismo pasa con la gente que está jubilada, que tiene una jubilación básica y si no tuviera la pensión por discapacidad no podría cubrir los remedios», ejemplificó Ascárate.
La referente explicó que desde Nación, la Anses va a notificar a cada provincia cuáles serán las personas cuya situación van a analizar, y a partir de esa notificación los beneficiarios tienen diez días para presentar una serie de requisitos. «Pero un diagnóstico nuevo sobre una discapacidad no se hace en dos días -remarcó-. Por ejemplo, hay que sacar un turno con un médico especialista. Y además, se vuelve muy difícil para una persona con múltiples discapacidades. Por otro lado, hay que justificar que se tiene un sueldo muy básico. Es más o menos lo mismo que ir a llorar para que no te saquen la pensión».
«Nosotros estamos tomando precauciones antes de que le llegue la notificación a la gente. Por eso pedimos que se acerquen a Fendij, donde van a recibir asesoramiento. Estamos trabajando con abogados y organizaciones sociales para que todos puedan tener los papeles a mano, para que podamos pedir los turnos necesarios dentro de los diez días», convocó.
Por otro lado, van a evaluar los casos en los que amerite presentar recursos de amparo para hacer presentaciones colectivas, que suelen ser más efectivas y económicas que las individuales.
Los datos sobre la cantidad de personas con discapacidad en Jujuy no son muy precisos, porque hay gente del interior que no sacó el Certificado Único de Discapacidad (CUD), un trámite que no se hace en todos lados. «Y hay gente del interior que quizás tiene el CUD pero necesitan trasladarse para hacer este trámite».
Lo que sí se puede medir es que el 40 por ciento de la población tiene alguna discapacidad adquirida, asociada al envejecimiento, como las discapacidades, motoras, visuales o auditivas.
