“El colonialismo no ha terminado en Abya Yala. Pero, todavía no se ha escrito el último capítulo de la conquista. Impulsamos la urgente descolonización”
Después de 500 años de colonialismo, las Naciones Indígenas en Jujuy atravesamos una difícil situación: despojo territorial, racismo, genocidio, femicidio, ecocidio de nuestros territorios, discriminación, profunda desigualdad social y cultural hacia hombres y mujeres, niñas y niños, indígenas que todavía existimos y resistimos, de uno u otros modos en las comunidades urbanas y rurales, en las ciudades, al sistema económico globalizado.
Miles de indígenas -la mayoría de la población- inmersos en la pobreza y en la indigencia extrema, tanto en los territorios comunitarios como en las zonas marginales de las urbes de Jujuy, en este siglo XXI. Sin acceso a un buen sistema educativo intercultural y bilingüe, sin acceso al mejor sistema de salud en plena pandemia, sin servicios públicos (agua corriente, electricidad, gas natural, cloacas, internet, etc.). Sin infraestructura adecuada (caminos pavimentados, calles pavimentadas, veredas, puentes, sistemas de riego, viviendas, hospitales, escuelas, etc.). Con un presente y un futuro económicos y laborales inciertos; prisioneros y sujetos a la dádiva de los históricos señores feudales de la Provincia de Jujuy y a los intereses económicos de las grandes empresas y potencias del mundo. Sin todo eso, aún seguimos de pie! Con sabiduría preexistente de milenios en armonía con la naturaleza, con un sistema comunitario económico, político y espiritual todavía vigente.
Estamos pagando el precio inhumano de la codicia de unos pocos, lo sabemos. Pero, mientras haya indígenas en estas tierras milenarias seguiremos nuestra lucha por la Libre Determinación de los Pueblos, como hombres y mujeres, hijos e hijas de la Pachamama. Y haremos de Jujuy un lugar mil veces mas hermoso, sin colonialismo.