El Festival Internacional de Cine de Alturas abre la convocatoria para la 10° edición que se llevará a cabo del 9 al 17 de mayo de 2025. El evento cumple 10 años exhibiendo las producciones de la América Latina, contribuyendo con el crecimiento de la cultura y la industria audiovisual de la región.
Los interesados e interesadas podrán inscribir sus producciones hasta el 15 de noviembre en las siguientes categorías:
Competencia Internacional de Largometraje de Ficción y Competencia Internacional de Largometraje Documental, para producciones de Argentina, Bolivia, Chile, Colombia, Ecuador, Perú y Venezuela.
Competencia Cortos NOA, destinada a cortometrajes de las provincias del noroeste argentino: Jujuy, Salta, Tucumán, Santiago del Estero, La Rioja y Catamarca.
Competencia Nacional Work in Progress de las Alturas, destinada a películas en desarrollo de Argentina.
En cuanto a las competencias internacionales de largometrajes, las obras deberán tener una duración mínima de 60 minutos y estar concluidas a partir del 1 de enero de 2023.
Por su parte, los cortometrajes de la región NOA deberán tener una duración mínima de 1 minuto y máxima de 30 minutos.
En WIP podrán presentar proyectos de género ficción, documental y animación enviando un link de visionado con un adelanto audiovisual del largometraje, el cual deberá tener una duración entre 5 y 10 minutos.
Las inscripciones se realizarán a través de la página web del Festival, donde también encontrarán las bases y condiciones para la convocatoria: https://cinedelasalturas.com.ar/
La Dirección Artística del Festival seleccionará 12 películas de cada una de las competencias internacionales, 12 cortometrajes y 8 películas en proceso para el WIP de las Alturas.
Los seleccionados competirán por premios monetarios en la 10° edición:
- Mejor Ficción: Estatuilla Andes y 2,5 millones de pesos.
- Mejor Documental: Estatuilla Andes y 2,5 millones de pesos.
- Mejor Cortometraje: Estatuilla Andes y 1,3 millones de pesos.
- Mejor Película en Proceso: Diploma y 1,5 millón de pesos.
A lo largo de 10 años, el Festival ha logrado posicionar a Jujuy como un epicentro de la industria audiovisual, destacándose por su compromiso con la promoción de nuevas expresiones cinematográficas y la formación de talentos emergentes.