El jefe de la agencia de la ONU para los refugiados palestinos (Unrwa), Philippe Lazzarini, pidió este viernes que se ponga fin a la «masacre» en la Franja de Gaza y al asedio impuesto por Israel a este territorio.
«El rumbo actual elegido por las autoridades israelíes no traerá la paz y la estabilidad que tanto israelíes como palestinos desean y merecen. Arrasar barrios enteros no es una respuesta a los atroces crímenes cometidos por Hamas. Al contrario, está creando una nueva generación de palestinos agraviados que probablemente continuarán el ciclo de violencia. Hay que poner fin a la matanza», indicó en un comunicado transmitido a los medios de comunicación.
«Hay que poner fin al asedio de Gaza y permitir que la ayuda humanitaria fluya sin restricciones», dijo el primer alto funcionario de la ONU que entró en Gaza desde el 7 de octubre, día en que militantes del movimiento islamista palestino Hamas mataron a más de 1.400 personas, en su mayoría civiles, y tomaron unos 240 rehenes, entre ellas una veintena con nacionalidad argentina.
We are devastated that 101 @UNRWA colleagues have been confirmed killed in📍#Gaza since the start of the war.
Mothers, fathers, teachers, nurses, doctors, guards, logisticians, support staff, all at the service of their community.
We honour their memory and their service. pic.twitter.com/qJjHeTWa4x
— UNRWA (@UNRWA) November 10, 2023
Esa agencia de la ONU informó este viernes que la cifra de sus trabajadores asesinados en la Franja de Gaza, por los bombardeos israelíes en represalia por la incursión a su territorio, ascendió a más de un centenar.
«Estoy devastado. Se confirmó la muerte de más de 100 colegas de la Unrwa en un mes. Padres, maestros, enfermeros, médicos, personal de apoyo. Unrwa está de luto, los palestinos están de luto, los israelíes están de luto», publicó Lazzarini en X (antes Twitter).
Por su parte, al alto comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, Volker Türk, instó a Israel a tomar medidas para «proteger a los palestinos» en Cisjordania, en un pedido que llega un día después de la muerte de 18 palestinos y una veintena de heridos en operaciones del Ejército israelí en el campamento de refugiados de Yenín y otros puntos de Cisjordania.
De visita en Jordania, el representante lamentó que los palestinos sean «sometidos diariamente a la violencia de las fuerzas y los colonos israelíes, malos tratos y arrestos, desalojos, intimidaciones y humillaciones» y precisó que 2023 es el año «más mortífero para los palestinos en Cisjordania, con cerca de 200 muertos incluso antes del 7 de octubre».
Devastated. Over 100 @UNRWA colleagues confirmed killed in 1 month.
Parents, teachers, nurses, doctors, support staff. @UNRWA is mourning, Palestinians mourning, Israelis mourning. Ending this tragedy needs #Humanitarianceasefire now.
— Philippe Lazzarini (@UNLazzarini) November 10, 2023
«Hemos hecho estas advertencias durante el último año», reiteró, informó la agencia de noticias Europa Press.
Desde principios de octubre, al menos 176 palestinos más, entre ellos 43 niños y una mujer, fueron asesinados, la mayoría a manos de las fuerzas de seguridad israelíes y al menos ocho de ellos a manos de colonos.
Más de 2.000 palestinos fueron arrestados y detenidos en operaciones en toda Cisjordania y documentamos casos inquietantes de malos tratos a los arrestados y sus familias», aseveró Turk.
En este sentido, denunció que el Ejército israelí utilizó de forma creciente más «tácticas y armas militares en operaciones» en la zona, que deben hacerse en «estricta conformidad con el Derecho Internacional».
«También ha habido un fuerte aumento de la violencia de los colonos y la apropiación de tierras en toda Cisjordania. Desde el 7 de octubre, casi 1.000 palestinos de al menos 15 comunidades de pastores han sido obligados a abandonar sus hogares. En el contexto del entorno coercitivo en el que viven, el desplazamiento de estas comunidades puede equivaler al traslado forzoso de una población, lo que constituye una grave violación del Cuarto Convenio de Ginebra», sostuvo.