En la reunión de la comisión de Peticiones, Poderes y Reglamento de este martes, la Libertad Avanza y el PRO congelaron la investigación sobre la visita de diputados libertarios a genocidas condenados por delitos de lesa humanidad, en el penal de Ezeiza.
Aportaron al freezer, la UCR y Encuentro Federal que vuelven a la vereda de los amigables después de protagonizar el rechazo del DNU de la Side y presentar solo una «moción de apercibimiento».
La decisión se oficializará la semana que viene en un plenario de comisiones, pero el acuerdo ya se cerró: el oficialismo quiere clausurar el tema y la oposición colaboracionista está dispuesta a concederlo, siempre y cuando lo anteceda algún atisbo de tirón de orejas. Después, borrón y cuenta nueva.
«Manejamos mal el tema. Durante el tiempo que transcurrió lo de Fabiola se pinchó y, en cambio, esto sigue, jodiéndonos», pensó en voz alta, un referente de la derecha gobernante.
De esta manera, el centro de la escena estará puesto, entonces, no en el carácter de los presos a los que habían ido a ver, genocidas condenados por delitos de lesa humanidad, sino a las irregularidades de la visita.
Según consta de la denuncia de Arrieta –y de las filmaciones que se filtraron–, los diputados ingresaron sin pasar por el detector de metales y sin dejar sus celulares, que fueron utilizados para sacar la foto familiar con los represores, entre los que estaban Astiz, Raúl Guglielminetti, Antonio Pernías, entre otros.
La diputada de Unión por la Patria, Paula Penacca, al término del encuentro legislativo, reclamó que “le hacemos un chas-chas en la cola a los diputados y a las diputadas que fueron a visitar a gente que asesinó, que torturó, que desapareció, que se robó bebés”
El cónclave que fue presido por la titular de la comisión mencionada, Silvia Lospennato, el asunto finalizaría con un mero apercibimiento a los diputados y diputadas visitadores, sin profundizar en las responsabilidades que le caben a los legisladores y legisladoras por el plan que estaban tramando para liberar o morigerar las condiciones de detención de los genocidas detenidos.
En la reunión de la comisión de Peticiones, Poderes y Reglamento de este martes estaba previsto que se definiera la creación de una comisión especial investigadora, pero la presidenta de ese cuerpo, Silvia Lospennato, señaló que de acuerdo al reglamento solamente el pleno podía determinarlo.
La coartada reglamentaria de la macrista para dilatar lo que aparentemente tenía acuerdo motivó la protesta airada de los representantes del UxP y de la izquierda, que denunciaron al PRO y a La Libertad Avanza de querer cerrar la investigación con un “tirón de orejas por portarse mal” para que la sanción sea apenas simbólica.
Penacca se quejó de que “a algunos les gusta discutir las cuestiones reglamentarias, pero no sientan posición política en relación a este tema tan importante, incluso para el futuro de la democracia”.
¿Qué sancionamos si no investigamos?
No fue solamente una visita: hay pruebas de que detrás de la reunión que tuvieron los diputados de LLA en Ezeiza existe un plan de impunidad para garantizar la libertad de los genocidas. pic.twitter.com/XrV8FBTVfp
— Paula Penacca (@PaulaPenacca) September 3, 2024
Apartándose de su rol específico como presidenta de comisión, Lospennato salió a contestarle a Penacca recordando que el artículo 36 de la Constitución identifica como “traidores a la patria” tanto a los que “se levantan en armas contra la Nación” como a “los corruptos” que “se roban el erario público para el enriquecimiento personal”.
A su turno, el jefe del bloque de La Libertad Avanza, Gabriel Bornoroni, confirmó lo que Penacca venía denunciando: que la idea era acotar la sanción a una mera expresión de rechazo, pero no ir más allá de eso.
“Se puede valorar una visita de forma negativa, repudiarla. Eso es aceptable y forma parte del juego político. Pero empezar a hablar de sanciones o de expulsiones es otra cosa”, consideró el cordobés.
Para reforzar su postura, el referente de la bancada oficialista señaló que avanzar en expulsiones de los diputados involucrados dejaría “antecedentes muy peligrosos para esta Cámara”.
“Y quiero decirlo con todas las letras. Esta Cámara tuvo diputados que se han sacado fotos con personajes como Nicolás Maduro, Fidel Castro, dictadores de otros países que también cometieron delitos de lesa humanidad. Fotos que también son reprochables. Pero imagínense si alguien hubiese pedido que esos diputados sean expulsados por sacarse esas fotos”, indicó.
También cuestionó que Unión por la Patria haya pedido que se incorporen como pruebas de la investigación a capturas de pantalla de chats de whatsapp privados, que “se grabaron sin consentimiento”.
“Lo único que se está haciendo es montar un circo político”, lamentó Bornoroni, que aclaró que su bloque estuvo a disposición desde el principio para “poner blanco sobre negro” y colaborar con la investigación.
No pudo evitar que un rato más tarde, el presidente del bloque de Unión por la Patria, Germán Martínez, apuntara contra él y lo acusara de “enmascarar la actitud de sus diputados para que no se pueda llegar hasta las últimas consecuencias” en materia de sanciones.
“El primer interesado en deslindar responsabilidades debería ser el presidente del bloque. Y yo no veo eso”, manifestó sobre Bornoroni.
“Todavía tengo expectativas de que no pongamos un manto de impunidad sobre un plan de impunidad”, señaló Martínez, que veía que ya que no tenía el número para imponer la creación de una comisión investigadora.
Martínez cerró, sin embargo, con un llamado a toda la oposición a «no poner un manto de impunidad sobre un plan de impunidad».