En el tercer mes del año volvió a acelerarse la inflación. Los precios minoristas medidos por el Indec arrojaron un alza cercana al 5 por ciento mensual. La devaluación de la moneda impactó en los precios de los alimentos, a lo que se sumaron nuevos tarifazos en servicios públicos. Los rubros que más aumentaron en marzo fueron educación, 17,9 por ciento, prendas de vestir y calzado, 6.6, y alimentos y bebidas 6.
El presidente Mauricio Macri había anticipado que habría un nuevo «pico» de inflación, tras lo cual volvió a prometer que comenzaría a bajar, como lo hizo en agosto de 2016, en septiembre de 2017, en marzo de 2018 y en febrero de este año.
Con la cifra mensual, la inflación acumulada en el trimestre asciende a 11,8 por ciento y en el cotejo de los últimos doce meses llegó a 54,7 por ciento, el mayor nivel desde 1991.
En febrero, el índice de precios al consumidor había arrojado un 3,8 por ciento de aumento y las consultoras privadas estimaban que el dato de marzo tendría un piso del 4 por ciento. Además del alza de la divisa hasta 44,96 pesos, el mes pasado hubo un aumento de 3 por ciento en combustibles, 14 por ciento en electricidad, 10 por ciento en colectivos y trenes y 15 por ciento en subte. También se anunció un ajuste 18 por ciento en el servicio de telefonía celular y entre 15 y 40 por ciento en colegios privados.
Macri insistió en que la inflación se desacelerará, pero en abril hay nuevos aumentos para mantener viva la llama de los precios. El subte pasó a 19 pesos, mientras que el precio de la carne y el pollo pegó un nuevo salto. En mayo se elevará otro 4 por ciento el servicio de energía eléctrica, mientras que las tarifas de agua se encarecerán un 27 por ciento.
Página/12