La defensa buscó despegar del vuelo del terror a los represores procesados

En la audiencia de ayer del juicio de lesa humanidad que se desarrolla en jujuy, la defensa de los represores procesados buscó desvincularlos del hecho que se juzga, el traslado de prisioneros en el vuelo A-718 el 7 de octubre de 1976, en el que fueron brutalmente torturados.

Se presentaron cuatro testigos aportados por la defensa, y el exmilitar imputado Horacio Marengo brindó un extenso testimonio en el que aseguró desconocer los hechos por lo que está procesado por los delitos de “privación ilegítima de la libertad” y “torturas”, al igual que los otros 12 acusados.

Antes de iniciar su relato, el Tribunal Oral en lo Criminal Federal de Jujuy (TOF) dictaminó que se cumplieron con todas las normas constitucionales en el proceso judicial, rechazando así una serie de impugnaciones presentadas por las defensas.

Para Marengo, se da por hecho el traslado de los detenidos a pesar de que no hay elementos probatorios, sino solo indiciarios. Marengo está acusado de ser el jefe del operativo del traslado de las 90 víctimas desde el Penal de Gorriti a La Plata y Devoto, en el denominado Operativo Aire 718.

Marengo endilgó toda la responsabilidad del traslado de los detenidos al coronel Carlos Bulacio, jefe del RIM 20, quien murió hace algunos años sin llegar a ser juzgado en las causas de delitos de lesa humanidad. En su testimonio ante el Tribunal, el exmilitar señaló que Bulacio presenció el operativo de traslado de los presos, desde que salieron del penal hasta que llegaron al aeropuerto, hasta que la nave partió.

En la jornada también testimonió por videoconferencia desde Catamarca Jorge Isaac Ripoll, imputado en una causa de lesa humanidad en esa provincia. A pesar de que la Fiscalía se opuso al testimonio por las imputaciones en otras causas jujeñas, el tribunal resolvió que declare. Ripoll era oficial de personal de la plana mayor del RIM 20 en 1976, y aseguró recordar a Marengo en esa unidad.