El índice de confianza de la población en las instituciones elaborado por Poliarquía muestra que la universidad pública es la que reúne la mayor calificación, con 71 puntos, entre mucha y bastante, con preminencia de la menos categórica de ambas.
Le siguen las fuerzas armadas, con 42 puntos, es decir, 29 menos, la Iglesia Católica, bastante más distanciada, con 23 puntos, y los medios de comunicación con 20.
Más distanciados, la Corte Suprema y el Congreso, con 11 ambos, las grandes empresas y los sindicatos con 7 y finalmente los partidos políticos con 6.
Por el voto negativo se destacan los sindicatos, que entre poca y ninguna confianza, juntan 92 puntos, y lo mismo las grandes empresas, mientras los partidos políticos, llegan a los 90, Corte y Congreso 87, medios de comunicación 77, la Iglesia 71, las Fuerzas Armadas 56 y finalmente la universidad es también la que menos desconfianza concita, ya que entre poca y ninguna reúnen 25 puntos.
La universidad pública es, por lejos, la institución más confiable del país
El director de la consultora, Alejandro Catterberg, destacó en un tuit que “las Universidades Públicas son la institución que mayor confianza genera entre los argentinos».
Y que «hay un ideal social en la educación pública, más allá del desprestigio de los dirigentes políticos que la defienden».
Con el índice a la mano, llamó la atención al Gobierno, en el sentido de que «no es lo mismo para Javier Milei enfrentarse al Congreso, los sindicatos, los partidos políticos, la justicia o los medios de comunicación que hacerlo contra las universidades y la educación”.
En un tuit titulado Causas Nobles, motivos oscuros, el mandatario ratificó que, «al margen de la discusión acerca de cuál es el modelo de educación superior deseable para un país en el que seis de cada diez chicos son pobres, en ningún momento el gobierno nacional insinuó la intención de cerrar las universidades nacionales».
Ideal social
Los resultados de encuesta de Poliarquía, que demuestra la existencia de «un ideal social en la educación pública», según interpretó Catterberg, y que es fuente de movilidad social ascendente, principio en el que se sustenta la clase media, son complementados por el economista Daniel Schteingart, cuando desarrolla en un cuadro en el que el 68% de los estudiantes de universidades públicas tiene padres sin estudios terciarios, y que ese porcentaje supera el 85% en universidades del conurbano como la de José C. Paz, Jauretche y del Oeste.