El jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, Horacio Rodríguez Larreta, inauguró hoy el nuevo período de sesiones ordinarias de la Legislatura porteña: realizó balance de lo ocurrido en 2020 con la pandemia del coronavirus e informó las proyecciones hacia 2021, con un mensaje de propuesta de diálogo pero con cuestionamientos al Gobierno nacional por la transferencia de recursos de coparticipación a la Provincia de Buenos Aires.
Lo hizo desde su casa luego de volver de Buzios y explicó los motivos de su receso: “Fue un año de mucho dolor para mí y para mi familia. En el fin de semana de año nuevo nos contagiamos todos. Este año más que nunca necesitábamos unos días. Por eso estuvimos afuera”.
Al respecto, informó que estará diez días en su domicilio por haber vuelto desde Brasil. «Voy a cumplir la norma en su interpretación más restrictiva y a hacer cuarentena. Permaneceré en casa y trabajaré desde acá”, anunció.
En relación con el ajustes y en las reducciones presupuestarias, responsabilizó a Nación por la transferencia de fondos coparticipables: «El Gobierno quitó a la Ciudad de manera inconsulta parte de los recursos que le corresponden”. Y vaticinó que “la quita para 2021 se proyecta en 65 mil millones de pesos”.
Sin embargo, Larreta aseguró que “vamos a aumentar la presencia policial en las calles. El prestigio de las fuerzas se construye en buenas prácticas y profesionalismo en funciones. En 2019 duplicamos el período de formación. La semana pasada 793 agentes egresaron con este nuevo plan”.
En relación con las disputas políticas, dijo estar convencido de que “la política tiene que estar a la altura de este esfuerzo. Tenemos que tender puentes más allá de cualquier discrepancia”.
Expresó: “Siempre busqué el diálogo y el consenso, soy así como persona y soy así en mi responsabilidad pública. y este año busque más que nunca dialogar y hacer acuerdo porque la gente lo que menos quiere es vernos pelear”.
Hacia el final, cerró el discurso con un mensaje: “Siempre voy a estar para terminar con la grieta. La grieta no mejora la educación, no da trabajo, no da salud, no construye puentes ni abre comercios. La grieta es un negocio de la política, no suma nada, sino que resta”.