El dirigente de la Organización para la Liberación de Argentina (OLA) Alí Peralta deberá presentarse este lunes en el marco de una causa contravencional que se inició en su contra por su supuesta participación en la movilización del 20 de junio en rechazo a la reforma constitucional. Sería un caso más de criminalización de la protesta, de los tantos que se están dando en la provincia, si no fuera porque por aquellos días Peralta se encontraba fuera de Jujuy, lo que demostró con los pasajes emitidos a su nombre.
«Lo extraño es que la contravencional plantea expresamente que disponen de testigos, videos y fotografías, y que por eso se me está llevando a juicio. Es increíble, como si yo hubiera estado a la vez en dos lugares, a 2000 kilómetros de distancia», comentó el dirigente en diálogo con El Submarino Radio (FM Conectar 91.5).
En concreto, se le imputa “obstaculizar el normal desenvolvimiento de los servicios públicos” y participar en “reuniones públicas tumultuarias desoyendo la orden policial de disolverse y retirarse en orden”, en el marco de la movilización del 20 de junio pasado. Lo cierto es que ese día el dirigente se encontraba en un sanatorio de la ciudad de Mar del Plata, acompañando a su padre en sus últimos días de vida tras años de lucha contra una larga enfermedad.
A través de su abogada, Lorena Mamaní, que integra el equipo legal de la Multisectorial Contra la reforma, Peralta presentó copias de los pasajes para mostrar que no se encontraba en la provincia. «Ameritaba que inmediatamente acusaran recibo y que todo quedara en un error, digamos, pero en cambio reafirmaron la contravencional y me citaron para el lunes», relató.
Peralta remarcó que, más allá de lo insólito de su situación personal, «salir a contarlo en los medios sirve para mostrar que estas causas contravencionales son un mamarracho, y lo mismo puede pasar con las causas penales».
«Son causas inventadas, sin pruebas, que tratan de estigmatizar a quienes estamos dando pelea contra la reforma y de disciplinar al conjunto del pueblo», afirmó.
Al analizar el contexto general en la provincia, Peralta destacó que «en la Multisectorial hay gremios, movimientos sociales, comunidades indígenas, gente de la cultura, y más allá de lo que cada sector visualiza como una agresión directa a sus reivindicaciones, lo cierto es que esta reforma inconstitucional promueve abiertamente el secesionismo, es decir, la separación de Jujuy de la Argentina en su economía, en sus finanzas y en su administración de las fuerzas de seguridad».
«A tal punto es terrorista y violatoria de la Constitución Nacional y atenta directamente contra la democracia, que partió del armado de grupos parapoliciales, facciosos, como los que han actuado en Purmamarca, mandando patotas a correr a nuestros hermanos de las comunidades. Todo esto se hace amparado sobre la reforma, que plantea un esquema represivo y la violación del orden republicano federal, agregó.
Respecto del pedido de intervención federal de la provincia que las comunidades presentaron al Congreso Nacional, el dirigente de OLA expresó: «Esperamos que se pueda avanzar, porque entendemos que el gobierno de Gerardo Morales ha incurrido en el delito de sedición. Él es el sedicioso.»
-¿Cómo cree que se podría destrabar el conflicto?
-Yo creo que se va a extender. Quizás haya momentos en que pueda bajar el nivel de participación y de tensión, pero hay una decisión de todos los sectores de continuar la lucha, porque todo el mundo está absolutamente convencido. Y en la medida en que más se estudia la reforma, más se la conoce y más organismos nacionales e internacionales intervienen denunciando lo que está pasando en Jujuy, más decisión hay de continuar la pelea. Así que me parece que puede haber momentos de repliegue, pero nada indica que esta lucha se vaya a frenar. Porque además, cada vez que Gerardo Morales ha intentado tensar más la cosa, ha habido una respuesta mayor por parte de los sectores populares.