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Gimnasia y Esgrima de Jujuy finalizó el año jugando mal pero mereciendo el triunfo en el clásico del norte, ante San Martín de Tucumán. Fue cero a cero, por la 12ª fecha del Torneo de la B Nacional. Hubo una buena cantidad de gente local y visitante, que dejó una muy buena recaudación en las arcas del club, que resultó el único ganador de la jornada.
El partido fue mal jugado por ambos equipos. La nula ambición del Santo de salir de su campo de juego hizo que en el primer tiempo nada pasara, salvo un cabezazo de Alexis Blanco que se fue cerca del palo.
En el complemento, Gimnasia se adelantó en el campo de juego y San Martín se refugió muy cerca de su arquero, Ignacio Arce, en forma peligrosa. El Lobo lo intentó, pero no acertaba tres pass seguidos.
El primer tiro del arco fue de Maki Salces, después de más de una hora de juego, y se lució el golero tucumano, que desvió la bocha al córner, que pateó el recién ingresado DiegoAuzqui por centímetros no fue cabeceado por Manchot en el punto de penal.
Luego, Leonardo Ferreyra llegó hasta el fondo y tiró un centro atrás, pero la respuesta del goleador Blanco fue la peor: paró, pisó la pelota y se cayó. El rebote le llegó a Renzo Tesuri, que pateó y salvó, y otro recién entrado, Rolando Serrano, al piso. Fue la mejor ocasión de gol. Fin del partido.
Los hinchas Cirujas, que llegaron en masa a Jujuy, festejaron el punto que lo acerca cada vez más a la Copa Argentina del próximo año, mientras que Gimnasia tendrá que esperar a la primera semana de febrero y ganarle a Almagro de visitante para clasificar.
En la conferencia de prensa, el entrenador del Lobo, Martín Astudillo, se mostró caliente por el empate. Adelantó que traerá jugadores del mediocampo hacia delante. La pretemporada empezará en la primera semana de enero 2018, con el objetivo claro: ganar en el reinicio del campeonato.
