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«Siempre falla el Estado. Sus discursos y sus políticas nos matan. A las mujeres en Jujuy nos matan porque dejan que nos maten». Así se expresó la abogada feminista Mariana Vargas al analizar la situación en la provincia a la luz de los últimos femicidios que se cometieron, cuatro en menos de un mes.
En diálogo con El Submarino Radio (FM Conectar 91.5), Vargas se refirió en particular a los dichos del ministro de Seguridad, Ekel Meyer, en relación al caso de Roxana Mazala, asesinada por su pareja, quien luego se suicidó.
«Justifican diciendo que Roxana volvió voluntariamente a su casa a convivir con el violento. Uno puede discutir ese discurso, pero el problema es que cala en algunos sectores. Se sigue planteando la culpabilización de las víctimas y se siguen reproduciendo las violencias. Porque si yo te convenzo que el problema es la piba que salió con una pollerita corta en medio de la cuarentena, entonces cualquiera tiene derecho a hacer cualquier cosa con esa piba», señaló.
Vargas calificó de «brutal» lo dicho por Meyer, y consideró que se trata de un «discurso profundamente misógino que es implementado desde el gobierno».
«Preguntémonos qué es volver voluntariamente -continuó la abogada-. Roxana tenía una medida exclusión. En Jujuy, cuando vencen las medidas cautelares de restricción y exclusión de hogar, no logramos que se reanuden. Hay tipos violentos que están contando los días para volver a la casa. ¿Qué pasa con esa mujer y ese violento cuando vence la medida? ¿Y si tenés hijos en común?»
En esta línea, recordó el caso de Zulma Valencia, asesinada por el padre de sus hijos en octubre de 2018. «Ella tenía una medida de restricción. Mantenía con el padre un vínculo no sentimental pero cotidiano, porque sus hijos estaban con él», precisó.
«El estado no resuelve el problema de las madres violentadas y mantiene el resguardo compartido de los hijos. Entonces nos matan porque permanece el vínculo con el violento. Siempre falla el estado», concluyó.
Vargas remarcó algo que no debería repetirse más: «Los femicidios son muertes evitables siempre». Y agregó: «Y acá el estado no solo no evita los femicidios sino que encima los justifica con el argumento de la responsabilidad individual».
«Sus discursos y sus políticas nos matan. A las mujeres en Jujuy nos matan porque dejan que nos maten», afirmó.
Desde algunas organizaciones de mujeres planean manifestarse esta noche en la sede del COE, cuando el gobernador vaya a dar su informe habitual. «Ayer hubo una marea impresionante, soñando con encontrar a Gabriela. El reclamo por su aparición fue uno de los cantos que más se escucharon. Pero la Casa de Gobierno estaba cerrada, así que queremos ir al lugar donde estos tipos dicen esos discursos justificantes», explicó.
«Después de la marcha en Palpalá, sacaron órdenes de detenciones porque se rompieron unos vidrios. Operativos, toda una logística para investigar quiénes habían sido. Mientras tanto acá tenemos un problema gravísimo y es que cuando estas pibas desaparecieron, nadie las buscó», afirmó, y recordó que, contra lo que dijo el ministro Meyer, los propios vecinos ya habían relatado que habían hecho las búsquedas en completa soledad.
Respecto de la persecución a quienes producen incidentes en las manifestaciones, Vargas analizó: «Hay violencias que nos están costando la vida y hay otras violencias que son insignificantes. La insignificancia es un gran tema del derecho penal, tanto que hay delitos que no se persiguen por su insignificancia».
«La sociedad tiene que comprender cuáles son las cuestiones que nos afectan, al punto de que estamos muriendo», propuso, y comentó: «Yo tengo una hija de 6 años y hace días me pregunto cuándo voy a permitir que vaya sola a comprar. Y no tengo fecha, porque no me animo. Es terrible que las opciones sean el encierro o la violación; el encierro o la muerte».
«Mientras tanto -reveló-, hoy el gobierno demoró la entrevista de la familia de Gabriela con la policía porque el gobernador estaba yendo a Palpalá. Queremos políticas, no marketing. Esa familia está quebrada y el gobernador está usando esta situación para ver cómo no se le desborda. Pero en realidad ya está desbordado. Morimos porque el estado deja que nos maten».
