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La oficial penitenciaria Romina Ivana Castro, tras ser atacada por su expareja Pablo Mamaní Luzcubir, también penitenciario, a tiros, se fue a su casa, en la jornada pasada, luego que fue dada de alta.
Castro está evolucionando favorablemente en su estado de salud luego de ser intervenida quirúrgicamente en el Hospital Pablo Soria de su pulmón izquierdo que fuera perforado por dos tiros. Fue atacada de atrás.
Romina fue baleada en las escaleras del primer piso de su casa ubicada en uno de los monoblocks del barrio Cuyaya, cuando iba a guardar su vehículo en una cochera, según su madre, el pasado 19 de setiembre.
En el mes de abril, el sujeto, luego de amenazas contra la vida de la mujer, la apuñalo tres veces en su cuerpo, violando restricción perimetral.
Luego de disparar contra su expareja, Mamaní Luzcubir, llamó a la casa de Castro y preguntó si ya había muerto y amenazó a sus familiares. El penitenciario se encuentra detenido e imputado por tentativa de homicidio doblemente calificado por el vínculo y violencia de género, donde ya declaró ante el fiscasl Bosatti y dio sus versiones del hecho y el motivo por el cual realizó el atentado contra Romina Castro.
