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Milagro Sala pidió que el presidente Alberto Fernández “use la lapicera” y firme el indulto a su favor, al cumplir (mañana) siete años detenida en Jujuy. «Tenga la valentía de decidir mi libertad», desafió la líder de la Tupac Amaru.
En una entrevista que brindó al diario Página/12, la dirigente social recordó cuando la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner le pidió a Fernández “que use la lapicera”. Sala afirmó que “la decisión pasa por él”, en referencia a su detención de la que este lunes se cumplen siete años. “Que tenga la suficiente valentía de hacerlo y le deje de tener miedo a los medios nacionales opositores”, aconsejó.
El mes pasado, militantes de la Organización Barrial Tupac Amaru, acompañados de otras agrupaciones, acamparon por tres días en la Plaza de Mayo para exigir que el Presidente firme el indulto en favor de Sala, luego de que la Corte Suprema de Justicia dejara firme la condena que le dictó el Tribunal en lo Criminal N.º 3 de Jujuy de 13 años de cárcel en la causa conocida como «Pibes Villeros». En ese expediente, la dirigente de la Tupac Amaru fue acusada de asociación ilícita y defraudación del Estado.
Los supremos tardaron casi tres años para confirmar el fallo de la justicia penal de la provincia, sin siquiera leer las apelaciones de la defensa de Sala y los argumentos del Ministerio Público Acusación que dirige Sergio Enrique Lello. La Corte, en su dictamen, simplemente decide no intervenir en la causa por tratarse de un trámite de la provincia de Jujuy.
Este lunes se cumplen siete años de su detención. Aquel 16 de enero de 2016 fue apresada en un operativo encabezado por el entonces ministro de Seguridad de la provincia, Ekel Meyer, quien luego fue premiado por el gobernador Gerardo Morales con una vocalía en el Superior Tribunal de Justicia local. Desde agosto de 2017 Milagro Sala cumple prisión domiciliaria.
En la entrevista publicada este domingo, Sala confiesa que en diciembre de 2019, cuando asumieron Alberto Fernández y Cristina de Kirchner, tuvo la esperanza de que “la historia iba a cambiar en la Argentina y que los que habían destruido el país iban a ir presos y los que ayudamos a reconstruir la Patria íbamos a estar en libertad”.
“Pensé que iba a terminar la persecución que estábamos sufriendo, pero lamentablemente no hemos tenido esa respuesta», afirmó.
A siete años de la privación de su libertad y con problemas de salud que motivaron un pedido de traslado a Buenos Aires por parte de su médico personal, Jorge Rachid, Milagro Sala sostiene: “Tengo el sueño de sentarme en la Corte Interamericana de Derechos Humanos y rendir cuentas de lo que hemos hecho con la Tupac Amaru».
