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«Si están ahí es porque el pueblo los puso, y el pueblo también los puede sacar», advirtió este viernes Mónica Cunchila, la mamá de Iara Sabrina Rueda, la adolescente de 16 años de cuyo femicidio se cumplió un año. En la marcha realizada por Madres y Padres del Dolor, Cunchila reiteró el pedido de justicia por su hija y por otros y otras jóvenes que murieron de forma violenta.
La mujer preguntó «dónde está el Consejo Provincial de la Mujer» y reclamó por la falta de presupuesto asignado para la aplicación de la norma con la que el año pasado se declaró la emergencia provincial en violencia de género, que se conoce como Ley Iara precisamente por su hija.
«En lo único que piensan es en ofrecer un subsidio monetario de 20 mil pesos. Piensan que los hijos tienen precio, pero los hijos de nadie tienen precio», denunció Cunchila, y agregó: «Tienen presupuesto para los programas, pero eso no es lo mismo que la emergencia».
La mujer hizo referencia al proceso de audiencias que se realizó el año pasado tras el cual se sancionó la Ley Iara. «Nos llevan a los padres a la Legislatura para que salga una ley que no tiene presupuesto, porque lo destinan para otra cosa», y remarcó que no hay psicólogos y que «cada abogado renuncia» cuando una mujer víctima de violencia de género pide ayuda del Estado. También exigió que se atiendan de manera integral los casos de abuso sexual de niñas y niños.
Mencionó luego a la titular del Consejo Provincial de la Mujer, Alejandra Martínez. «Cuando le pregunté por qué no me ayudaron, me contestó que el gobernador tenía muchas cosas importantes de qué ocuparse y no iba a estar día a día con el caso de Iara», reveló.
Iara Sabrina Rueda desapareció de su casa de Palpalá el 23 de septiembre de 2020. Su familia hizo la denuncia esa misma noche pero no se activó el denominado Código Rojo, que debe disparar la búsqueda inmediata. Junto a vecinos y amigos, los padres de Iara hicieron sus propios rastrillajes por la zona. Recién el día 28 la policía halló su cuerpo sin vida en un descampado del barrio 2 de Abril. La autopsia mostró que había sido asesinada al día siguiente de su desaparición.
«No les importé ni les importo ahora, nos dejaron solos», denunció Mónica Cunchila en la marcha de este viernes. «¡Que trabajen!», reclamó, y advirtió: «Si están ahí es porque el pueblo los puso, y el pueblo también los puede sacar».
Por el femicidio de Iara están imputados Raúl Arnaldo Cachizumba y Mauricio Esteban Abad, y un adolescente menor de edad. La familia Rueda asegura que hay otros implicados y exigen que se profundice la investigación.
Por estas semanas se está cumpliendo un año de un período trágico que en la provincia de Jujuy se llevó de forma violenta la vida de cinco mujeres. Cuando aún se realizaban marchas para reclamar justicia por Cesia Reynaga, Iara Rueda, Gabriela Cruz y Roxana Mazala, se conoció el femicidio de Alejandra Nahir Álvarez, de 17 años, a manos de su expareja y padre de su bebé, que ahora tiene 18 meses.
La familia de Alejandra denunció su desaparición el 9 de octubre de 2020. Al día siguiente fue hallado su cuerpo sin vida en la colectora de la ruta 66.
Su papá, José Álvarez, es otro de los padres y madres que cada semana se movilizan para pedir justicia. Este viernes interpeló directamente al discal Diego Cussel. «Si rechazó el recurso de la defensa de Rodrigo Villanueva, ¿por qué no eleva a juicio? Lleve a juicio a los asesinos. ¿Para qué los tienen guardados? ¿Que cumplan una condena!», exigió.
«Si usted viera lo que es el bebé de Nahir, ve la foto de ella y la llama. ¿Usted sabe la tortura que vivimos nosotros?», clamó Álvarez.
Al igual que los padres de Iara, la familia de Alejandra Nahir sospecha que el imputado por el crimen de la adolescente no es el único culpable. «Que el asesino hable, porque él sabe. Hay de dos a tres personas más», afirmó José.
