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Dos chicos entre 16 y 17 años fueron detenidos y acusados de violar a una niña de 15 años, durante una fiesta privada, que realizaron entre compañeros de un conocido colegio privado. El encuentro se realizó hace casi un mes atrás, pero recién se conoció el terrible hecho en las últimas horas, un retardo judicial.
El caso tomó repercusión en las redes sociales y causó indignación en la comunidad educativa. Los autores del hecho son integrantes de familia conocida en el medio, por lo menos, uno de ellos.
El hecho fue denunciado en los primeros días del mes de febrero por los padres de la niña y recién el jueves pasado, con mucho retraso judicial, el juzgado de menores solicitó la detención de los jóvenes, que están alojados en el Centro de Contención Juvenil del barrio capitalino de Islas Malvinas.
Uno de ellos está imputado por la supuesta autoría del delito de «abuso sexual con acceso carnal, agravado por ser cometido por dos personas» y el restante participante del ultrajante hecho por el delito «abuso sexual con acceso carnal en grado de tentativa y partícipe necesario del mismo delito, agravado por ser cometido por dos personas».
Debido al poder que ejerció una de las familias sobre el expediente, el mismo fue cajoneado casi un mes entero antes de las medidas procesales que se llevaron a cabo por parte del Juzgado de Menores, a cargo de Pilar Medina.
En las redes sociales, este hecho no pasó desapercibido y algunas cuentas de Instagram se encargaron de identificar a las personas involucradas en este tipo de delito.
Los adolescentes imputados en la causa, conocieron causa de imputación en la jornada de ayer y designaron abogados defensores.
El hecho sucedió ocurrió una casa, cuando varios estudiantes de un colegio secundario privado de San Salvador de Jujuy participaban de una fiesta, donde aparentemente, no había ninguna presencia adulta.
La denuncia consta que los dos jóvenes imputados en esta causa habrían abusado sexualmente de la niña de 15 años, en una habitación de una vivienda y cuando la víctima logró salir de la situación, avisó a uno de sus amigos y pidió que le llevara a su casa y contó a sus padres sobre el hecho, para luego denunciarlo en sede policial.
Se supo que la víctima ya prestó declaración en Cámara Gesell y los imputados se negaron a hacerlo. Luego del feriado de carnaval, atestiguarán los jóvenes estudiantes secundarios que asistieron a esa fiesta, que aseguran están siendo extorsionados o “comprados” para cambiar su testimonio y ocultar la verdad de lo sucedido en esa casa.
