Paula Álvarez Carreras, integrante del equipo de defensores de Milagro Sala, adelantó que apelarán la decisión del juez Isidoro Cruz de rechazar el hábeas corpus que presentaron. Respondió además al magistrado, quien acusó a los abogados de realizar acciones “abusivas”: “Cada vez encontramos más herramientas para seguir recurriendo, porque no podemos creer el nivel de desprecio por la Constitución Nacional y la doctrina de la Corte”, afirmó la letrada a El Submarino Radio (91.5).
“Todo esto afecta directamente el derecho de Milagro y de las otras compañeras. Así que apelaremos todo lo que sea necesario”, advirtió la abogada.
Explicó que el hábeas corpus se presentó, en primer lugar, para resolver rápidamente la situación de agravamiento de las condiciones de detención de Milagro Sala, a partir de la decisión del juez Pablo Pullen Llermanos de devolverla al penal de Alto Comedero, el sábado pasado.
“Nosotros consideramos que Milagro corre peligro en el penal, y esa es precisamente la razón por la que la CIDH le concedió la cautelar -repasó Álvarez Carreras-. Entonces cuando Pullen revoca la prisión domiciliaria y decide que vuelva, ella vuelve a estar en riesgo”.
El miércoles pasado, los tres abogados -Álvarez Carreras, Luis Paz y Ariel Ruarte- tuvieron una audiencia con el juez Cruz para explicarle la situación. “Él ya tenía en su poder los informes del cuerpo médico del Poder Judicial, que daban cuenta de la situación de crisis, además de otros informes que había pedido y que fundamentaban la solicitud de internación en un clínica privada”, repasó la abogada.
“Le pedimos que al menos resolviera la cuestión de la internación, porque ella necesita hacerse estudios más profundos que los que pueden hacerle en el penal”, agregó.
Respecto del rechazo del habeas corpus por parte del juez Cruz, explicó que van a presentar una apelación, pero que primero necesitan conocer los fundamentos. De todos modos, lo que originó esto, la resolución de Pullen Llermanos, ya está recurrido. La apelación se presentó el viernes pasado y está tramitando en la Cámara de Apelaciones y Control. Si la rechazan, continuarán en la Cámara de Casación.
Álvarez Carreras mencionó el intento de suicidio de Mirta Guerrero el miércoles en el penal, luego de recibir una condena a 3 años y 3 meses de prisión en un juicio al que la abogada calificó como “ridículo, que se resuelve de otra manera, con suspensión de juicio a prueba, con acuerdo entre las partes; un juicio que fue un circo porque querían condena efectiva, por eso le dieron esa pena, sin pruebas para condenarla”.
“La expusieron a esa situación y ella buscó contención en la unidad, y no la encontró. Pidió al jefe pero no fue atendida. Lo esperó hasta última hora. Y vivió una situación extrema que la llevó a ese intento de suicidio que por suerte no tuvo resultado”, relató.
La abogada remarcó que “ya hay un incumplimiento internacional del estado argentino, y de esto son responsables todos los funcionarios que están entendiendo en la situación de Milagro en este momento”.
“Los jueces tienen que respetar la Constitución y el Sistema Interamericano de Derechos Humanos. Y nosotros cada vez encontramos más herramientas para seguir recurriendo, porque no podemos creer las resoluciones, el nivel de desprecio por la Constitución Nacional y la doctrina de la Corte”, continuó.
-El juez Cruz, en la conferencia de prensa, dijo que la acción de los abogados de Milagro Sala es “temeraria y abusiva”. ¿Qué responden a eso?
-Que los jueces hagan esas apreciaciones es sumamente peligroso para el estado de derecho. En un proceso penal donde corre riesgo la libertad de una persona, los abogados deben poder actuar sin presiones. Nosotros hacemos lo que corresponde, y no corresponde que los jueces hagan esas apreciaciones porque se está entrometiendo incluso en el ejercicio liberal de la profesión. Y no podemos darnos el lujo de permitir que sigan firmando resoluciones en las que se violan las garantías y los derechos de las personas sometidas a proceso.
-Pullen Llermanos dispuso que Milagro volviera a la cárcel, según dijo, para cuidar de su salud. Pero pasó una semana y no le hicieron ningún estudio. ¿Cómo se interpreta?
-A esta altura, el único razonamiento posible es que quieren todo lo contario, que no quieren cuidar su integridad ni su vida. Uno de los argumentos con los que recurrimos la decisión de Pullen es justamente ese. Él dice que ella no se quiere realizar estudios, pero no es verdad. Ella pidió realizárselos en una clínica, lo que es su derecho. Y el juez encontró un vericueto para sancionarla y que vuelva al penal, donde su situación se va a deteriorar. Vemos que hay una clara intención de acorralarla; si no, no se explica que fundamente que quiere cuidar su integridad y haga todo lo contrario.