Luego de la liberación del remisero Javier Alfaro, amigo de Ana Gómez, confesa asesina de su hijo, Alexis de 3 años, el pasado 19 de marzo, el fiscal especializado en delitos sexuales Alejandro Bossatti brindó anoche una conferencia de prensa y dio explicaciones porque liberó al supuesto autor de los abusos contra los hermanos Mamaní.
Dijo que “el pedido de cese de detención fue otorgado porque no hay indicio que el hombre haya actuado contra los menores”, pero aclaró que “por el momento mantiene la caratula de abuso y se irá viendo con el correr de la investigación”.
El funcionario del Ministerio de la Acusación señaló que “Alfaro prestó mucha colaboración para dilucidar la causa y además dio pautas que se había visto imposibilitado de realizar cualquier acto sobre los menores en el lapso que se sospecha ocurrieron los hechos. Hay elementos que hacen que su detención no sea necesaria y eventualmente se podría cambiar su situación procesal”.
En cuanto a la posibilidad de contacto entre los menores y el imputado por abusos, Bossatti afirmó “Según lo que señalaron, Alfaro habría visto a los niños, pero no tuvo contacto. La mamá de los menores se habría bajado del vehículo para darle el pésame a Alfaro por el fallecimiento de su esposa y luego se fue”.
Este giro inesperado tuvo en las últimas horas la causa que conmocionó a la comunidad jujeña, se le agrega que existen dos informes médicos sobre el crimen del niño de tres años y el supuesto abuso que tanto él como su hermanito de siete años habrían sufrido.
Uno de los profesionales que atendieron a los hermanitos Mamaní en el Hospital Materno-Infantil y el restante, del Cuerpo Médico del Ministerio Público de la Acusación. Son contradictorios, en relación a los abusos sexuales, uno dice que hubo y el otro lo desestima.